Economía

El sector de Dependencia: «subir el presupuesto no es la solución»

La patronal del sector socio-sanitario de residencias y centros de día, la Federación Empresarial de Asistencia a la Dependencia (FED), eligió ayer Valencia para protagonizar el primer parón «simbólico» en protesta a la deuda de las Administraciones públicas con con el sector.

El presidente de la FED durante el parón para exigir el pago de la deuda
El presidente de la FED durante el parón para exigir el pago de la deudalarazon

VALENCIA- Tras unos minutos de silencio, su presidente, José Alberto Echevarría, denunció el impago de cerca de 75 millones de euros, que ahoga a estas empresas y podría provocar el cierre en cadena de las instalaciones. En su opinión, el crecimiento del presupuesto para 2012 destinado a las ayudas a la dependencia no es suficiente. «El aumento no es para afrontar la deuda atrasada».

Así, pese a que la Conselleria de Justicia y Bienestar Social es de las pocas que ha visto aumentar su presupuesto para el próximo ejercicio, las movilizaciones continuarán todos los jueves hasta firmar un acuerdo. De momento, se sigue trabajando con el Consell en la aprobación de una línea de «conforming».

Sin embargo, las quejas no vienen sólo por parte de los empresarios. Algunos familiares de personas dependientes confesaron estar indignados también con la patronal. ¿El motivo? No se les informó de los graves problemas económicos hasta un día antes de la manifestación. En esta línea, consideraron que lo idóneo hubiera sido conocer la situación cuando empezaron los impagos hace meses. De esta manera, se hubiera podido hacer presión con más margen de maniobra y no a la «desesperada». Ahora, en palabras del presidente, la quiebra de muchas residencias es «cuestión de días y no de semanas o meses». Por ello, los familiares mostraron su preocupación ante el cese de muchos de los servicios que ofrecen estos centros. «A lo mejor, dejan de encender la calefacción, de suministrar medicamentos o de comprar pañales».

Pese a las críticas y a que los objetivos no sean exactamente los mismos, colaborarán con los empresarios, ya que están en el «mismo barco».

Respecto a la propuesta que toma más fuerza, que sean los propios familiares quienes empiecen a pagar por mantener a sus dependientes en las residencias, manifestaron su desacuerdo. Muchos ni tienen medios económicos ni pueden cuidar de sus enfermos en sus casas.