Con o sin reptiles se arrastra la autonomía

Daría lo que fuese por conocer el Wikileaks del caso de los EREs irregulares. Quién, por qué y para qué se filtra un pillaje que en estos momentos tiene cogidos por los dídimos a dos ex consejeros de Empleo, uno de ellos secretario general de la mayor agrupación provincial del PSOE andaluz. Por cierto, habrá que ver también si la agencia IDEA, es decir, si la Consejería de Innovación, fue vehículo activo o pasivo de esta presunta trama. Porque entonces serían cuatro los exconsejeros en almoneda y además de distintos clanes de una misma familia socialista que por ahora carga toda la responsabilidad en Francisco Javier Guerrero. El problema es que Guerrero fue durante nueve años director general de Trabajo y Seguridad Social de una Administración presidida por Manuel Chaves, vicepresidente del Gobierno de la Nación, a quien muy pronto van a comenzar a hacer preguntas y no sólo por lo de la subvención a la empresa de su hija. Perdón, donde trabaja su hija. Aunque también cabe la posibilidad de que quienes han sido defenestrados de algunas consejerías en los últimos tiempos no hayan quedado satisfechos con sus actuales destinos. ¿Estamos asistiendo tal vez a una guerra civil, sorda y sórdida, en las entrañas del PSOE andaluz?

Ya hemos apuntado a Chaves pero igual Pizarro y Zarrías deberían dar también alguna explicación. De momento habrá que estar tan pendientes de sus palabras como de sus silencios y de sus rictus.

Y otra hipótesis, menos probable, es que sea Griñán el que esté lavando la casa a través de un consejero Recio necesitado a su vez de marcar distancias con su pasado almeriense. Aún guardo el archivo sonoro del presidente de la Junta de hace apenas tres semanas en Córdoba haciendo una reflexion en abstracto sobre las prejubilaciones tras ser preguntado por la de Cajasur, entidad que al final, dicho sea de paso, va a echar a menos gente que otras cajas menos vilipendiadas. ¿Debió callar Griñán o sabía lo que decía? Sea como fuere, en la región con más paro de España el director general de Empleo de la última década es muy probable que se haya situado fuera de la ley. Le llaman fondo de reptiles porque la autonomía andaluza ya no puede arrastrarse más.