Cine

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Sicarios de alto voltaje

Director: Gary McKendry. Guión: Matt Sherring.Intérpretes: Jason Statham, Clive Owen, Robert de Niro, Dominic Purcell. EE UU-Australia, 2011. Duración: 100 minutos. Acción

La Razón
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Mal presagio: el título original, «Killer Elite», nos remite a una película de Sam Peckinpah que el propio cineasta odiaba con toda su alma y que en España se llamó «Los aristócratas del crimen». El debutante Gary McKendry parece tener una agenda más ambiciosa que la que blandía el Peckinpah que, en 1975, había de aceptar encargos para sobrevivir. Quiere hacer un filme de acción con comentario sociopolítico como relleno sorpresa. Quizá le parecía pertinente resituar el nuevo imperialismo en una época, los ochenta, en la que Occidente ya había invertido mucha energía en participar en guerras ajenas. Ese es el pretexto de la película para darse importancia, aunque tiene los pies clavados en el cine de acción mamporrero, con Jason Statham como el-hombre-duro-con-un-corazón-de-oro, mercenario de retirada que vuelve al ruedo para salvar a un colega (De Niro) de las manos de un jeque perverso, y Clive Owen interpretando a su némesis con cara de palo. Entre sicarios anda el juego, pero la sangre nunca llega al río: imposible imaginar un filme que maneje con tan escasa destreza la mecánica del asesinato a sueldo y que busque con tanta desesperación un clímax perdido entre falsos finales.
 

lo mejor:
deja entrever que Statham tiene cualidades que su etiqueta de duro no deja ver
lo peor:
acaba por lo menos tres veces y pierde la fuerza narrativa que le quedaba