San Blas

Del «polyespam» de Aguirre al pan de oro de Tomás Gómez

El estilo y los materiales acentúan las diferencias entre las sedes regionales de PP y PSOE

Del «polyespam» de Aguirre, al pan de oro de Tomás Gómez
Del «polyespam» de Aguirre, al pan de oro de Tomás Gómezlarazon

MADRID- Calle Génova y plaza de Callao, poco más de 500 metros cuadrados en una planta y más de 800 en dos pisos... Las diferencias entre las sedes regionales del Partido Popular (PP) y el Partido Socialista de Madrid (PSM) son evidentes a primera vista. La disparidad entre las oficinas de populares y socialistas se acentúan aún más si se bucea en su interior. Aquí van sólo algunos detalles.Mientras el partido liderado por Esperanza Aguirre comparte edificio con la dirección general del PP, los de Tomás Gómez se independizaron hace tiempo. En 2003 se compraron un edificio de 2.500 metros cuadrados en la calle Miguel Fleta, en el distrito de San Blas, sin embargo prefieren trabajar en un lugar más cercano al centro político de la región. Es por esto por lo que ahora han decidido alquilar por 13.000 euros al mes sus nuevas oficinas en el emblemático edificio del Palacio de la Prensa.La nueva sede de los socialistas aún está en obras pero su ubicación es, sin lugar a dudas, mucho más señorial. El nuevo inmueble que ocuparán no es otro que el primer edificio de ladrillo visto y estilo neoyorquino que se construyó en la capital. La sede del PP también es céntrica pero, por el contrario, se encuentra en un edificio corriente de oficinas.Lo primero que se ve cuando entras en la primera planta del número 13 de la calle Génova es un enorme logotipo del PP hecho de «polyespam» (corcho blanco) y aquí viene una de las coincidencias entre ambos «cuarteles generales»: Los de Aguirre disponen de una planta diáfana en la que se distribuyen los despachos, todos tras un cristal transparente. Los socialistas, su parte, también están tratando de hacerse con un gran despacho diáfano justo en el centro del segundo piso del Palacio de la Prensa para instalar allí una Sala de Juntas con capacidad para más de 40 personas.El capítulo de las salas en las que las Ejecutivas de ambos partidos toman sus decisiones va aparte. En el primer piso de Génova cuentan con dos despachos de reuniones, uno para celebrar los cónclaves del Comité regional, con capacidad para 23 personas, y otra sala para las ruedas de prensa con capacidad para sesenta. Los del PSM tendrán, además de este gran salón de Juntas, otro a su lado más pequeño para otras reuniones.En el caso de la nuevas instalaciones del PSM, según pudo saber este diario, la sala dedicada a los periodistas tendrá la mitad de capacidad. Habrá asientos para unas 30 personas y un espacio por detrás para que se sitúen las cámaras.El techo también guarda grandes diferencias, mientras los socialistas trabajarán bajo vigas de madera policromada, lámparas de gran valor y preciosas bóvedas decoradas con pinturas y pan de oro, el escenario de los trabajadores de Madrid es mucho más austero. El artesonado en el cuartel general del PP está formado por sobretechos sintéticos. La luz artificial no llega en este caso a través de antiguas lámparas de cristal –en la nueva sede socialista podrán disfrutar de los destellos de una lámpara de araña y otra tipo granja– sino de los típicos fluorescentes que dan luz en las oficinas habitualmente. Otra de las diferencias la pondrá el suelo. Mientras Tomás Gómez pisará sobre un parquet del tipo AC-6, como el que se instala en los hoteles de mayor lujo, Aguirre se tiene que conformar con plantar sus zapatos sobre tarima flotante, un sintético que imita a madera.Poco podrá hacer en este ránkig de sedes políticas los posters de la campaña en los que aparece Esperanza Aguirre y el merchandising que adorna la oficina del PP, frente a las lujosas e historiadas lámparas de la sede del PSOE.Tampoco en cuestión de mobiliario destaca la sede del PP. Los de Esperanza Aguirre han optado por muebles funcionales, la mayoría de ellos comprados en las famosas tiendas de la firma sueca, IKEA, conocidas por su precio asequible y porque es el comprador quien monta sus propios muebles. Por su parte, la sede autonómica de Izquierda Unida también destaca por su austeridad. Ubicada en la céntrica calle Téllez número 54, está situada en la entreplanta de este edificio de oficinas. El espacio ocupado por IU tiene, según fuentes del grupo, alrededor de 400 metros cuadrados en los que se distribuyen 16 despachos, una sala de reuniones, un almacén y un pequeño «hall» o recepción. En esta sede trabajan diariamente, según las mismas fuentes, unas quince personas. IU lleva cuatro años en Téllez, 54.