¿En qué consiste la Ley de Autonomía de Hong Kong que desafía a China?

Después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmara la Ley de Autonomía de Hong Kong y una orden ejecutiva que eliminará el estatuto comercial preferencial de la ciudad, expertos jurídicos han advertido que “todo está sobre la mesa” en lo que respecta a posibles acciones punitivas contra Hong Kong.

Dicha ley establece una vía clara para sancionar a instituciones financieras e individuos, aunque debido a los prolongados períodos de revisión, no podrá entrar en vigor hasta diciembre de 2021, a más tardar.

El estatuto llega después de que Estados Unidos ya haya revocado las licencias de exención del acceso preferencial de Hong Kong a los controles de exportación, privando a la ciudad de los envíos de tecnología sensible procedentes de Estados Unidos, en respuesta a la controvertida ley de seguridad nacional de China para la ciudad.

En virtud de la Ley de Política de Estados Unidos-Hong Kong de 1992, Washington concedía un trato preferente a Hong Kong en las relaciones comerciales y económicas, siempre y cuando la ciudad siguiera siendo “suficientemente autónoma” del continente. Hong Kong ha disfrutado de ese trato separado y especial desde la entrega de Reino Unido a China en 1997, sobre la base de que Pekín practica el modelo de “un país, dos sistemas”, que fue acordado por China y que garantizaba un alto grado de libertades para Hong Kong.

Inmigración

Entre los cambios clave establecidos por la orden ejecutiva, se encuentran los referentes a la política de inmigración de Estados Unidos. Así, los titulares de pasaportes de Hong Kong ya no recibirán un trato diferente al de los titulares de pasaportes de China.

En lo que se refiere a los periodistas, los del centro financiero pueden solicitar un visado de cinco años de entrada múltiple a EE.UU., mientras que los del continente sólo pueden solicitar un visado de una sola entrada válido hasta tres meses.

Precisamente el prestigioso diario “The New York Times” anunció el miércoles que el próximo año trasladará a un tercio de su personal de Hong Kong a la capital de Corea del Sur, Seul, citando la nueva y controvertida ley de seguridad nacional y los problemas para conseguir los visados de trabajo.

Exportaciones e importaciones entre EE UU y Hong Kong

Anteriormente, como territorio aduanero separado para las importaciones en Estados Unidos, Hong Kong no estaba sujeto a los aranceles aplicados a China, incluidos los del artículo 301 sobre unos 370.000 millones de dólares de EE.UU. de mercancías chinas que se aplican actualmente.

En el pasado, en virtud de los Reglamentos de la Administración de Exportaciones (EAR) y el Reglamento del Tráfico Internacional de Armas (ITAR), las exportaciones de bienes similares, programas informáticos y tecnología a Hong Kong recibían un trato favorable. Ahora estarían sujetas a controles más restrictivos. Algunas exportaciones requerirían inmediatamente la concesión de licencias y se prohibirían estrictamente las relacionadas con artículos militares o satélites.

Inversiones y propiedades en EE UU

El secretario de Estado de EE UU puede prohibir a ciertas personas o entidades invertir o transferir cualquier propiedad en el país. Esto incluye a los funcionarios del gobierno de Hong Kong o a los líderes involucrados directa o indirectamente en el desarrollo y aplicación de la ley de seguridad nacional. También incluye a quienes socavan el desarrollo democrático de la ciudad, censuran o penalizan la libertad de expresión.Las sanciones pueden aplicarse a quienes hayan ayudado material, tecnológica o económicamente a estas personas, de forma que a los afectados y a sus familiares directos no se les permitirá entrar en EE UU.

Educación e investigación científica

Las repercusiones se extienden al mundo académico, ya que Estados Unidos suspende la cooperación con la Universidad China de Hong Kong en materia de investigación en ciencias de la tierra y pone fin al programa de intercambio Fulbright.

Acuerdos de extradición entre Hong Kong y EE UU

Estados Unidos también suspenderá el acuerdo de extradición entre ambos gobiernos, y pondrán fin a la capacitación de los miembros de la fuerza policial o los servicios de seguridad de Hong Kong en las Academias de Aplicación de la Ley Internacional del Departamento de Estado de los Estados Unidos.