Estado Islámico

Daesh publica las fotografías de los asaltantes de una cárcel en Afganistán

Lograron la liberación de decenas de terroristas que ahora volverán a los atentados

Dos de los terroristas posan tras las armas utilizadas para el asalto a la prisión
Dos de los terroristas posan tras las armas utilizadas para el asalto a la prisiónjmzpri

El Estado Islámico ha logrado, por fin, culminar una de sus viejas aspiraciones: asaltar una prisión y liberar a algunos de sus combatientes. Como se ha informado, ocurrió en la cárcel de Nangarhar, en Afganistán y se han apresurado a publicar las fotografías de los que han llevado a cabo la acción criminal.

La agencia Amaq, de la banda terrorista, hace un pormenorizado relato: “Los combatientes del Estado Islámico liberaron a cientos de prisioneros de una prisión fuertemente fortificada en el este de Afganistán, en el que murieron decenas de policías y militares afganos, y en el que una base de la coalición internacional fue alcanzada por morteros. Atacaron la Prisión Central de Nangarhar, en la ciudad de Jalalabad, y pudieron destruirla, liberar a cientos de prisioneros y matar y herir a docenas de sus guardias y las fuerzas que les proporcionaron apoyo. El ataque comenzó con una operación de martirio llevada a cabo cerca de la puerta de la prisión por un combatiente del Estado Islámico que conducía un coche bomba, seguido por un grupo de combatientes que asaltaron los muros de la prisión después de detonarlos con dispositivos explosivos; luego se enfrentaron con los guardias con varias armas, mientras otros grupos de combatientes emboscaron las carreteras. Cientos de prisioneros lograron escapar aprovechando la preocupación de las fuerzas afganas para repeler elataque”.

Uno de los asaltantes lanza una proclama
Uno de los asaltantes lanza una proclamajmzpri

Se lo había ordenado su anterior “califa” Abu Bakr Al Bagdadi, en una intervención difundida por vídeo y, por fin, han logrado ese objetivo. Además de la liberación misma de los prisioneros, se trata de subir la moral de los que permanecen en prisión en distintos países del mundo, entre ellos España, donde la lucha contra el yihadismo ha llevado a la cárcel a decenas de terroristas. Un motivo más para mantener la alerta ante la amenaza yihadista.