La familia real británica reza por la salud del duque de Edimburgo: “No volverá a casa pronto”

El estado de salud del príncipe Felipe ha despertado la preocupación de los miembros de la Familia Real británica, que en estos momentos permanecen “unidos en oración” después de que el esposo de la reina Isabel II haya pasado su primer día completo en el hospital St. Bartholomewde, en el departamento de cardiología, donde la prensa británica cree que podría permanecer hasta seis semanas.

Este hospital cuenta con el centro cardíaco más grande del Reino Unido y es el mayor centro de excelencia para pacientes adultos con cardiopatías congénitas. El duque de Edimburgo podría permanecer ingresado hasta abril si tuviera una infección cardíaca que requiera un tratamiento de antibióticos por vía intravenosa.

El Daily Mirror cita una fuente cercana que asegura que “el personal y toda la Familia Real están unidos en sus oraciones por el duque. Ha habido un esfuerzo colectivo para mantenerlo a él y a la reina a salvo durante la crisis del coronavirus durante los últimos 11 meses, pero se produjo un cambio en el estado de ánimo cuando todos comenzaron a descubrir que el duque no volvería a casa pronto”.

Mientras tanto, crecen las críticas por la entrevista de dos horas que Harry y Meghan han concedido a la estrella de la televisión estadounidense Oprah Winfrey, que se emitirá el próximo lunes en la CBS. Expertos en la realeza británica han criticado el inoportuno momento de la pareja para una entrevista en la que vierten críticas veladas a la Familia Real británica.

Por su parte, la reina Isabel II, de 94 años, se ha mantenido al frente de su agenda. Este lunes, el Palacio de Buckingham emitió nuevas imágenes de ella sonriendo mientras participaba en la inauguración de una estatua virtual de su rostro con altos funcionarios australianos.