En serio peligro

“Ahora solo podemos escondernos”: decenas de afganos y 200 estadounidenses quedan atrapados en Kabul

La retirada de EE UU de Afganistán supone un momento aterrador para los ciudadanos afganos que ayudaron a las tropas norteamericanas en su misión

Combatientes talibanes patrullando calles de Kabul
Combatientes talibanes patrullando calles de KabulRahmat GulAP

Cuando los últimos cinco aviones de transporte militar de Estados Unidos despegaron el lunes de Afganistán, dejaron atrás a unos 200 estadounidenses y a miles de afganos desesperados que no pudieron salir del país y ahora deben confiar en que los talibanes les permitirán abandonar el país.

Ahora que las tropas norteamericanas ha abandonado el país, los estadounidenses restantes desean irse y hay decenas de afganos que corren serio peligro porque ayudaron a las tropas estadounidenses en su misión y ahora tendrán que depender de la presión diplomática para garantizar su salida de forma segura.

Para esos afganos, cuyas vidas se ven amenazadas porque trabajaron con las fuerzas estadounidenses o los aliados, la retirada de Estados Unidos de Afganistán marcó un momento aterrador, un final sombrío para semanas de esfuerzos por intentar conseguir un lugar codiciado en uno de los vuelos de la evacuación estadounidense.

“No hay opción para nosotros”, dijo un afgano que trabajaba para un proyecto estadounidense en un mensaje a ‘USA Today’ el lunes. “Ahora solo podemos escondernos”, agregó.

Blinken tratará de ayudar a los “atrapados”

El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que Estados Unidos seguirá tratando de sacar a los estadounidenses y afganos del país, y que trabajará con los países vecinos de Afganistán para asegurar su salida por tierra o en vuelos chárter una vez que se reabra el aeropuerto de Kabul.

“No nos hacemos ilusiones de que todo esto vaya a ser fácil o rápido”, dijo Blinken, y añadió que el número total de estadounidenses que permanecen en Afganistán y que todavía quieren salir podría ser de unas 100 personas.

Poco después de que el Pentágono anunció el lunes el término de la retirada militar de Estados Unidos, Blinken dijo que la embajada en Kabul permanecerá cerrada y vacante en el futuro inmediato. Los diplomáticos estadounidenses, dijo, tendrán su base en Doha, Qatar.

“Continuaremos con nuestras incesantes labores para ayudar a los estadounidenses, a los extranjeros y a los afganos a salir de Afganistán si así lo deciden”, dijo Blinken en un discurso desde el Departamento de Estado. “Nuestro compromiso con ellos no tiene fecha límite”.

El general de la Marina Frank McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, dijo en rueda de prensa que el ejército estadounidense pudo sacar hasta 1.500 afganos en las últimas horas de la misión de evacuación. Pero ahora le corresponderá al Departamento de Estado, en colaboración con los talibanes, sacar a más personas.

Según McKenzie, no quedó ningún ciudadano varado en el aeropuerto y tampoco en los últimos vuelos militares que salieron. Dijo que el ejército estadounidense mantuvo la capacidad de sacar a los estadounidenses hasta los últimos minutos, pero “ninguno llegó al aeropuerto”.

“Hay mucha angustia asociada a esta salida”, dijo McKenzie. “No pudimos sacar a todos los que queríamos sacar. Pero creo que si nos hubiéramos quedado otros 10 días tampoco habríamos sacado a todos los que queríamos sacar”.