Muere desangrado un agresor sexual al que cortaron los genitales y la Policía no busca al atacante

Reginald Alan Roach, reconocido por las autoridades británicas como delincuente sexual, fue encontrado muerto por un hombre que paseaba a su perro en un parque cerca de una zona industrial abandonada en Bangor (Gales).

Según certificó el forense, Roach murió desangrado después de que alguien le cortara los genitales y le dejara abandonado en el polígono industrial. La doctora encargada de hacer la autopsia ha declarado que la causa de la muerte era un “shock y posterior hemorragia debido a heridas incisas causadas por la extirpación de los genitales”.

La Policía de Gales, por su parte, ha calificado la muerte del exhibicionista como “inexplicabe” y han informado de que, por el momento, “no se está buscando a nadie más” por su presunta relación con este fallecimiento. Según ha explicado a The Mirror un portavoz de la Policía “para terminar con las especulaciones inútiles podemos confirmar que no estamos buscando a nadie más en relación con la muerte de Reginald Alan Roach”.

Roach era un conocido de la Policía, que había cometido diferentes delitos en los últimos años. Una semana antes de su fallecimiento compareció ante un Tribunal de Llandudno por incumplir el 13 de septiembre los requisitos de notificación en relación con el registro de delincuentes sexuales.

Además, el pasado mes de agosto, Roach admitió haberse exhibido desnudo de cintura para abajo en el hotel Travelodge, por lo que fue condenado a 16 semanas de cárcel y el pago de 177 dólares. En ese momento, Roach se incluyó a sí mismo en la lista de delincuentes sexuales por orden del juez.

Por otra parte, En 2020 admitió haber destruido un monumento a la amapola el día después del Domingo del Recuerdo en 2019.