Desastre

El huracán "Melissa" arrasa Jamaica y entra en Cuba con una gran fuerza destructiva

Más de 735.000 personas han sido evacuadas en Cuba ante el paso del ciclón, donde ha llegado con vientos de 200 km/h. De momento, ha provocado 7 muertos

El huracán "Melissa", de categoría 5, golpeó con violencia la isla de Jamaica durante la noche del martes, dejando una estela de destrucción que incluye viviendas arrasadas, infraestructuras dañadas, cortes eléctricos masivos y deslizamientos de tierra. El huracán ha provocado de momento la muerte de siete personas: tres en Jamaica durante los preparativos de la tormenta, tres en Haití y uno en la República Dominicana. Los vientos de más de 240 kilómetros por hora provocaron escenas de caos antes de que el ciclón abandonara el país con categoría 4, rumbo hacia Cuba, donde ya ha forzado la evacuación de más de 735.000 personas.

Horas después, "Melissa" ha tocado tierra en Cuba con categoría 4 y vientos sostenidos de más de 200 kilómetros por hora. Al llegar a tierra, ha caído a categoría 3. La depresión ha llegado a la isla por el sur, a unos 90 kilómetros al oeste de Santiago de Cuba. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha avisado de que el peligro por inundaciones repentinas y corrimientos de tierra sigue siendo extremo, tanto en Jamaica como en Haití, República Dominicana y Cuba.

El primer ministro jamaicano, Andrew Holness, lamentó en su cuenta de Facebook que la isla “ha sido devastada por el huracán Melissa”, aunque aseguró que su gobierno “reconstruirá y lo hará aún mejor que antes”. Holness declaró a Jamaica como “zona catastrófica” y anunció el inicio inmediato de labores de rescate y recuperación, mientras cuatro hospitales resultaron severamente afectados.

El impacto fue tan severo que, según la organización NetBlocks, la conectividad a Internet en la isla cayó hasta el 30% de los niveles normales debido al colapso de la red eléctrica y de comunicaciones. En redes sociales circularon videos que muestran techos de hojalata arrancados por el viento y árboles derribados, mientras los residentes intentaban asegurar sus viviendas en medio de ráfagas huracanadas.

En medio de la emergencia, el gobierno jamaicano ha pedido calma a la población. La ministra de Educación, Habilidades, Juventud e Información, Dana Morris Dixon, afirmó que “no hay necesidad de preocuparse” y destacó que el Ministerio de Turismo mantiene contacto constante con los hoteles para garantizar la seguridad de los turistas. Holness, por su parte, advirtió contra la especulación de precios y subrayó la necesidad de “proteger a los consumidores y mantener la estabilidad”.

Mientras tanto, en Cuba, el presidente Miguel Díaz-Canel confirmó que el huracán ya comenzó a afectar la zona suroeste del país con vientos de hasta 215 km/h y lluvias torrenciales. El Instituto Meteorológico (Insmet) prevé que el ojo de ‘Melissa’ penetre por la provincia de Santiago de Cuba y se acerque también a Granma, Guantánamo y zonas costeras del oriente cubano. En la ciudad de Santiago se reportan inundaciones, desbordamientos de presas y deslizamientos de tierra.

Díaz-Canel informó que se han desplegado brigadas de electricidad, recursos hídricos, comunicaciones y construcción para atender los daños y declaró que “habrá mucho trabajo por hacer”, aunque aseguró confiar en la capacidad del país para recuperarse “en la producción de alimentos y la reconstrucción de viviendas”.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU anunció que está coordinando una operación humanitaria desde Barbados con más de 800 toneladas métricas de alimentos para asistir a 86.000 personas en Haití durante dos semanas, además de suministros de UNICEF y la OIM listos para ser transportados por vía aérea una vez que mejoren las condiciones meteorológicas.

Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC), Melissa ha perdido algo de intensidad, degradándose a categoría 3, pero sigue siendo un huracán “mayor y extremadamente peligroso”. Se espera que atraviese el este de Cuba durante la madrugada y se dirija después hacia las Bahamas y las Bermudas, donde mantendrá fuerza de huracán y traerá lluvias de hasta 25 centímetros, marejadas de hasta 3,6 metros y vientos dañinos.

El paso de ‘Melissa’ deja un panorama de devastación y alarma en todo el Caribe. Aunque se prevé que la tormenta se adentre en el Atlántico abierto en los próximos días, sus consecuencias humanas y materiales persistirán mucho después de su partida.