Bruselas

Salah Abdeslam renunció a inmolarse en el último momento

Oficiales de policía escoltan a un detenido en Molenbeek
Oficiales de policía escoltan a un detenido en Molenbeeklarazon

Salah Abdeslam –el único autor material del 13-N todavía vivo y supuesto cerebro de los ataques de París– trata ahora de restarle importancia a su participación en los atentados. Durante su interrogatorio el pasado 19 de marzo explicó que «alquiló coches y reservó hoteles a demanda» de su hermano Brahim, aunque apunta como responsable de los atentados de París a Abaaoud, según informa la cadena francesa BFM

Salah Abdeslam, detenido en Bruselas cuatro meses después de los atentados de París, ha empezado a dar detalles de la organización de los ataques contra la capital francesa a los investigadores. Asegura que renunció a hacerse explotar en el último momento y minimiza su relación con Abdelhamid Abaaoud. También niega conocer a los otros tres kamikazes del Bataclan aunque da una cifra de los participantes en las matanzas: nueve personas, además de él mismo.

Salah Abdeslam defiende que fue su hermano quien le llevó a participar en los atentados y repite su nombre una y otra vez. Fue él quien le pidiço alquilar coches y reservar hoteles. Y fue también Brahim /que se hizo explotar en los atentados) quien le dio su cinturón de explosivos que finalmente no activó. Para justificar que su nombre aparece en las compras logísticas para preparar los ataques asegura que «el dinero venía de Brahim».

El detenido apunta como responsable a (Abdelhamid) Abaaoud.«Lo sé por mi hermano Brahim. Él me explicó que Abaaoud era el responsable. (...) Vi a Abaaoud en Charleroi la noche del 11 al 12 denoviembre 2015. Es la única vez que he visto a Abaaoud en mi vida».

Y sin embargo, una contradicción más en la declaración del terrorista, ambos fueron condenados juntos en 2010.

Cuando recuerda la noche del 13 de noviembre, en la que tenía que hacerse explotar en el estadio de Francia junto a otros tres kamikazes, Abdeslam explica que sólo conocía a uno de ellos, a Bilal Hadfi.

«Tenía que entrar como público en el estadio, pero no tenía entrada» ha explicado a los investigadores. «Así que renuncié cuando aparqué el coche. dejé a mis tres pasajeros y seguí conduciendo».