Un plan de vacaciones diferente: 4 bodegas para descansar y hacer una cata de vino

Hace apenas una semana muchos españoles hacían su maleta, se dejaban el ordenador en casa y decían adiós al teletrabajo para dar la bienvenida a sus vacaciones idílicas. Muchos otros nos tenemos que esperar un poco m que aguantar y no nos vamos a engañar, se nos han puesto los dientes largos y nos habéis dado mucha envidia (de la buena). Es por ello que estamos planeando un fin de semana de julio para hacer un ‘break’ en nuestra rutina. Si eres más de una copa de vino que de una caña (o de ambas), de planes diferentes y estás pensando en hacer una escapada, antes de tirarte más de quince a la bartola, sigue leyendo porque aquí tienes las cuatro bodegas para un fin de semana perfecto.

Hacienda Zorita (Salamanca)

El corazón del Valle del Duero, a las orillas del río Tormes, alberga los muros de más de 40 habitaciones y villas. Una hacienda dominica que data del siglo XIV en la que podrás disfrutar de una cata personalizada, una buena comida en medio de la naturaleza, un crucero privado en los Cañones del Duero, paseos en bicicleta por el viñedo o senderismo.

Marqués de Riscal (Álava)

Ejemplo de que tradición y vanguardia casan a la perfección. Algunos le llaman el ‘chateâu del futuro’ y no nos sorprende porque se trata del proyecto de enoturismo más importante de España. Hotel de lujo, dos restaurantes del chef riojano Francis Paniego y spa. ¿Se puede pedir más? Un verdadero santuario de bienestar.

Pazo de Fefiñanes (Cambados, Pontevedra)

Entre las 100 mejores del mundo para Wine&Spirits. Si habías pensado en el norte o tu destino de vacaciones es Galicia incluye esta parada en tu plan de viaje. Estás ante la primera bodega gallega en comercializar un vino albariño con marca y etiqueta, instalada en un pazo construido en el siglo XVI con clara influencia italiana. El sabor de este vino te invitará a una buena mariscada de las Rías Baixas.

Valbusenda Hotel Bodega & Spa (Toro, Zamora)

Experiencia en todos los sentidos porque no sólo te cuidarás por dentro sino también por fuera. Adiós al ritmo frenético y descanso gracias a los tratamientos del spa que usan uva, como el Wine Masaje. Habitaciones con vistas a los viñedos y por supuesto arte culinario, la cocina de Zamora reinventada.

Experiencias únicas para desconectar, disfrutar y unirnos a nuestra historia. ¡Estamos ya haciendo la maleta!