Crema solares
¿Podemos seguir utilizando la crema solar del verano pasado? Una dermatóloga responde
Te contamos los trucos infalibles para saber si los fotoprotectores son beneficiosos a nuestra piel después de estar abiertos durante meses
Sabemos que debemos utilizar protector solar durante 24/7 tanto en los días nublados o de lluvias intensas como en aquellos con altas temperaturas. Y todavía con más justificación ahora que estamos entrando de lleno en el verano. Y es que, inconscientemente, cada vez que se asoma un rayo de luz por la ventana nuestra mente lo asocia con tomar el sol. Una acción-reacción a la que se suma el mismo dilema cada año: ¿se puede reutilizar la crema solar del año anterior? Porque muchas veces ocurre que no llegamos a terminarla por completo y directamente hacemos uso de ella para ahorrar dinero, así como no malgastar el invertido.
Entre otros productos de belleza, las cremas solares se convierten en nuestro mayor aliado una vez queda inaugurada la temporada de buenas temperaturas. Las llevamos (o deberíamos de llevarlas) en nuestros bolsos para protegernos de los rayos ultravioletas tanto instantes antes de salir de casa como en cualquier momento para reaplicar. Y aunque los expertos en dermatología recomienden utilizar este ítem durante los 365 días del año, lo cierto es que muchos de nosotros solamente lo utilizamos en los meses más calurosos. Es por ello que solemos recurrir a los fotoprotectores que nos sobraron del año pasado sin preguntarnos si realmente es beneficioso para nuestra piel o no. La dermatóloga Dra. Elena Martínez pone en preaviso de todas las consecuencias que podríamos experimentar si el protector solar está pasado.
Qué ocurre si utilizamos las cremas solares del año anterior: consecuencias y consejos de una experta
De acuerdo con el testimonio de la dermatóloga, la decisión de seguir utilizando o no una crema solar después de un año dependerá de dos factores. Por un lado, tendremos que prestar atención a la fecha de caducidad, puesto que si no la hemos sobrepasado, se podrá seguir utilizando. Por otro lado, también será importante saber qué es el símbolo PAO (Period After Openning), este término hace referencia al tiempo que la crema tiene vida útil después de estar abierta. "Aparece como un bote con la tapa abierta y en el interior del bote un número y una letra habitualmente suele ser 9M o 12 M, indicando que el envase puede utilizarse hasta los nueve meses de haber estado abierto o hasta los 12 meses desde que se abrió", explica. Un dato de lo más relevante para saber definitivamente si es óptima o no para darle una segunda vida este verano. Y cabe destacar que estos consejos son útiles tanto para las cremas solares corporales como para las faciales.
Ahora bien, ¿qué ocurre si utilizamos un protector solar caducado? No sería del todo efectivo y, por tanto, tendremos más riesgo de quemaduras. Asimismo, según Martínez, estos productos tienen conservantes para mantener las cremas libres de sobrecrecimientos de bacterias, por lo que al llevar mucho tiempo abiertos, puede ocurrir que tengan alterada la flora, así como puedan producir problemas.
Otro de los trucos definitivos para saber si una crema solar está pasada es el color, olor o textura de esta. "Generalmente empieza a coger un tono amarillo marrón y empiezan a aparecer grumos. Existen factores que hacen que las cremas se 'pasen' con mas facilidad: altas temperaturas (por ejemplo, dejarlo en el coche), exposición a la luz solar directa, contaminación por contacto directo con la piel o la arena", determina la especialista.
¿Qué tipo de protectores solares suelen tardar más en caducarse?
Si no abrimos los protectores solares, cada uno de los formatos tendrán una vida útil de 2 a 3 años desde su fecha de fabricación. Ahora bien, una vez abiertos cambian su duración:
- Cremas y lociones. "Suelen durar 12 meses tras abrirse, pero si se exponen al calor, como en la playa o en el coche, su estabilidad se reduce", comenta la experta.
- Sprays. "Aunque también duran unos 12 meses, están mejor sellados y menos expuestos al aire, lo que puede darles un poco más de estabilidad si se almacenan bien", añade.
- Geles y fluidos. En cambio, este tiende a degradarse un poco más rápido, sobre todo si tienen alcoholes.
- Sticks. Suelen durar hasta 24 meses, ya que no tienen ni agua ni emulsionantes y están más protegidos.
Ahora que estamos a punto de hacer uno de los planes favoritos de todos (playa, ducharse e ir a un restaurante), es de vital importancia tener en cuenta el truco infalible para saber si una crema solar se puede seguir utilizando. Con ello, debes mirar las indicaciones que detalla el propio producto, sin olvidarte todos los consejos de la Dra. Elena Martínez.