Calzado

Del despacho a la calle: el arte de combinar trajes con sneakers

La vuelta a la rutina oficinista tras las vacaciones no exige aparcar la comodidad en el armario

Zapatillas deportivas.
Zapatillas deportivas. New Balance

El mes de septiembre marca el regreso de muchos profesionales a la oficina, dejando atrás los meses de teletrabajo estival. Con el fin de la jornada intensiva y la vuelta a la rutina presencial, se reajustan también los códigos de vestimenta habituales en el entorno laboral.

Históricamente, el calzado formal ha sido la norma en el entorno de oficina, relegando las zapatillas al ámbito deportivo. Esta percepción ha cambiado en los últimos años, disipando el estigma asociado a su uso en contextos profesionales.

Lejos de ser un signo de descuido, optar por zapatillas en el ámbito laboral se ha convertido en una muestra de estar al día con las tendencias de moda actuales. Refleja una búsqueda de funcionalidad sin renunciar a la imagen o a la profesionalidad requerida.

La zapatilla se asienta en la oficina

La progresiva normalización de este tipo de calzado ha llevado a que, incluso en los entornos más formales, su presencia sea habitual. No obstante, la elección adecuada es fundamental para mantener la profesionalidad, tal y como informan desde GQ. Cada sector tiene sus propias particularidades en este sentido.

No es lo mismo el ambiente de una consultoría que el de una agencia de publicidad, cada uno dicta sus propios códigos estéticos. Los profesionales son los que mejor conocen los límites de su entorno laboral para integrar este calzado de manera acertada.

Como regla general, se aconseja priorizar modelos discretos, tanto en forma como en color. Las zapatillas clásicas en tonos como el blanco o el negro constituyen una opción versátil inicial, combinando bien con traje o con pantalones chinos y vaqueros.

A partir de esta base, y en función de la aceptación en cada oficina, se pueden incorporar gradualmente diseños más atrevidos o con detalles distintivos, siempre sin perder la compostura y seriedad requerida en el lugar de trabajo.

Modelos que encajan con la jornada laboral

La oferta actual de calzado deportivo permite una amplia variedad de modelos que se adaptan a la perfección al entorno laboral. Muchos de ellos se sitúan a caballo entre la estética deportiva y la formal, incorporando materiales de alta calidad como la piel para un acabado sofisticado.

Las costuras y los detalles artesanales son elementos que aportan elegancia al diseño, permitiendo que estas zapatillas encajen en ambientes que hasta hace poco eran coto exclusivo del zapato clásico. La funcionalidad y la estética se unen.

Asimismo, hay una gran inclinación por la sostenibilidad, con modelos fabricados a partir de materiales veganos o reciclados. Esta tendencia no solo responde a criterios ambientales, sino que también ofrece un diseño moderno y consciente para el usuario.

La comodidad es un factor relevante a la hora de seleccionar el calzado para la oficina. Las suelas amortiguadas y los diseños ligeros aseguran que el pie se mantenga confortable durante toda la jornada, especialmente con la vuelta a los horarios completos.

La versatilidad en los colores y las líneas limpias son clave para integrar las zapatillas en diversos estilismos, desde los más formales a los casuales. Un enfoque en lo clásico y lo minimalista garantiza la discreción necesaria para el día a día.

Firmas tradicionales del sector deportivo han recuperado modelos icónicos que, gracias a su diseño atemporal y su variedad cromática, se han convertido en referentes para el vestuario de oficina, combinando historia y las tendencias del momento.