La adicción al alcohol de Brad Pitt, uno de los motivos de su divorcio

El actor habla por primera vez sobre su separación de Angelina Jolie en una entrevista a «GQ Style»

Suman ocho meses desde que la pareja más admirada de Hollywood decidiera divorciarse. El pasado septiembre Angelina Jolie y Brad Pitt pusieron fin a 12 años de amor y, ahora, el actor ha hablado por primera vez de ello durante una extensa entrevista que concedió a la revista «GQ Style». El intérprete, además de protagonizar una sesión de fotos, se sinceró al hablar sobre sus sentimientos y sobre cómo ha afrontado este duro proceso.

Tras confirmar que ambos decidieron mantener los trámites del divorcio en privado para preservar la intimidad de sus seis hijos, el protagonista de «Aliados» (2016) admitió recibir terapia emocional. «El primer impulso es aferrarse y luego viene el cliché: “Si amas a alguien, déjalo libre”. Ahora sé lo que eso significa», explicó en la entrevista, además de confesar que quiso evitar la ruptura con Angelina, sin éxito.

La adicción al alcohol de Pitt ha sido uno de los detonantes del fin de su matrimonio: «Dejé todo menos la bebida cuando formé una familia (...) Estaba bebiendo mucho. Se convirtió en un problema». Afirmó que lo ha superado, alegando que «no quería vivir así más» y que gracias a la terapia ha logrado conseguirlo: «Ahora tomo zumo de arándano y agua con gas. Tengo el tracto urinario más limpio en todo Los Ángeles. ¡Te lo garantizo!», bromea el artista de 53 años.

Ser una estrella de la meca del cine a veces conlleva un precio a pagar muy alto. El actor admitió que pasaba mucho tiempo alejado de sus hijos por su profesión. «Lon niños son delicados. Necesitan que les cojas de la mano y que les expliques las cosas. Cuando estaba tan ocupado con el trabajo, no escuchaba. Quiero ser mejor en eso». Ello ha hecho que en estos meses, Brad haya priorizado a sus hijos Maddox, (15), Pax, (13), Zahara, (12), Shiloh, (10), y Vivienne y Knox, de 8. Sin embargo, ahora lo que más teme es que tengan que hacer frente a la ola mediática que provoca su separación.

Después de la tormenta viene la calma, o eso dicen. Pareciera que Pitt, a través de su aspecto, en el que se puede apreciar una notable pérdida de peso hiciera saltar las alarmas del duro bache que está atravesando en estos momentos. Si bien fuentes cercanas al actor declararon a «People» que este cambio ha sido para bien. «Brad está entrenando todos los días. Está muy deportista, delgado, saludable y sobre todo mucho más feliz. Todo ha mejorado con su familia y los problemas se resuelven ahora en privado». La ayuda de las terapias ha servido de mucho: «He pasado por dos psicólogos hasta encontrar la correcta», aseguraba el intérprete. Pero no sólo él se ha puesto en manos de un profesional, sino que Angelina también ha seguido el mismo ejemplo. La ex pareja asiste a la terapia de la prestigiosa terapeuta de Hollywood Katherine Woodward-Thomas.