Leonor, una princesa azul en Asturias

Los Reyes han visitado Asturias por primera vez acompañados de sus hijas. Doña Letizia cedió el relevo a sus hijas para ser las protagonistas de la ocasión, aunque todas las miradas estaban puestas en el debut de Leonor como Princesa de Asturias. Un día muy importante para ella, ya que no solo realizaba su primer viaje oficial, sino que lo hacía el día en el que el Principado celebraba cuatro fiestas: la comunidad, el centenario de la coronación canónica de la Virgen de Covadonga, los 100 años de la creación del Parque Nacional de la Montaña y el 1.300 aniversario del origen del reino de Asturias.

Así, para la ocasión, por la mañana la Princesa se ha dejado ver con los colores de la bandera asturiana. Su vestido es de manga francesa en tela estilo «tweed», que mezcla hilos de diferentes colores, en su caso en azul y gris, y que hizo famosa a Coco Chanel, pero en lugar de usarlo en vestidos ella lo hacía en chaquetas de traje. Da, además, la casualidad de que el cuello es del mismo parecido que sus chaquetas: cerrado y redondeado. Sus zapatos son los mismos que calzó en enero, cuando se le impuso el Toisón de Oro, unos modelos Pretty Bailarinas en tono azul. Después de la misa por la Virgen de Covadonga, el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, le regalaba tanto a ella como a su hermana una medalla con la Virgen en oro blanco y una joya en la corona y por el reverso la cruz de la victoria, símbolo de bandera asturiana.

Por la tarde ha preferido un «look» más sencillo y perfecto para hacer senderismo por la montaña asturiana. Ha elegido unos pantalones de color caqui de Mango y una blusa blanca de Nanos, y ha calzado unas zapatillas de Reebok.

En el atuendo de la futura heredera se ha apreciado también un cambio, su peinado. Para el día que visitaba a la Virgen de Covadonga e inauguraba un nuevo mirador en el Parque que llevará su nombre, ha optado por un nuevo corte, sin sus típicas trenzas de raíz y con la melena lisa y hasta el hombro con movimiento y volumen, algo que se consigue gracias al «brushing», una técnica que en múltiples ocasiones ha lucido la Reina.

Padres e hijas han ido conjuntados, duranto todo el día, tanto en sus colores como en las telas de los vestidos, ya que la Princesa y la Infanta lucían el mismo corte de traje, a excepción del color y los detalles. Mientras que el de Sofía iba adornado por cuatro pequeños bolsillos, el de Leonor era sencillo, con una simple unión en la cintura que hacía efecto de cinturón. Sin embargo, por la tarde, la Infanta ha lucido una camisa de rayas blancas y rojas y unos pantalones negros y ha calzado también unas zapatillas Reebok. Doña Letizia ha llevado un vestido a medida de Carolina Herrera en rojo y el Rey, traje azul marino. Los Monarcas se han mostrado muy atentos a sus hijas en todo momento. Un día que la Princesa Leonor recordará.