Moda

Roberto Verino: «Hay que hacer país y dejar las guerras cainitas»

El diseñador anunció ayer que se retira de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid. Su atención se centra ahora en las ventas por internet

Roberto Verino: «Hay que hacer país y dejar las guerras cainitas»
Roberto Verino: «Hay que hacer país y dejar las guerras cainitas»larazon

El diseñador anunció ayer que se retira de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid. Su atención se centra ahora en las ventas por internet

Era un secreto a voces que Roberto Verino no desfilaría en esta edición de MBFW Madrid, pero nos pidieron guardar la noticia hasta que él lo comunicase. Ese día llegó ayer. Primera incógnita despejada: no está arruinado:«Nunca nos ha ido mejor, hemos mejorado el rendimiento, estamos a deuda cero y preparados para crecer sin perder el norte. Hemos pasado el bache con nota», así nos lo aclara el propio diseñador desde su fábrica en Orense. Entonces, ¿cuál es el motivo? «Nos hemos dado cuenta de que nuestras ventas están creciendo mucho en internet, es un camino indiscutible y vamos a apoyarlo. Hasta lo vemos en los políticos, los que se manejan bien on-line son los que más éxitos están teniendo», explica, y añade que «eso exige esfuerzos porque somos sólo mi equipo y yo, que además nos gusta conciliar. Hay un cambio en las formas de comunicar, ahora lo más importante es la inmediatez; a seis meses vista el cliente se confunde. Además, en la pasarela de Madrid sólo nos dan treinta entradas para nuestros consumidores y eso no es nada», asegura Verino. «Hemos decidido darnos un plazo de dos años para cambiar las formas, porque no tenemos el don de la ubicuidad y nuestra capacidad, si queremos también disfrutar de la vida, es limitada. Algo tenemos que dejar y es desfilar en Cibeles, porque no llegamos a todo».

Hay pasarelas que ofrecen la venta inmediata de los desfiles, pero eso no convence a Verino: «Vosotros habéis iniciado ese cambio. Las pasarelas de LA RAZÓN han sido una referencia para nosotros. Nuestro consumidor quiere pieles en invierno y bañadores en verano, son los clientes, las tiendas, las que necesitan comprar a seis meses vista, y para ellos ya estamos en las ferias». Asegura que, aunque fuera de la MBFW, no dejarán de presentar sus colecciones: «Vamos a hacer presentaciones en tiempo real para los consumidores específicos en distintas ciudades, incluido México, donde montaremos una estructura para dar servicio a Miami, Colombia y ese área de influencia». Le recuerdo a Verino que él formó parte, en su día, del grupo de «diseñadores disidentes» por no estar de acuerdo con la pasarela Cibeles y ahora inicia otra pequeña «revolución», pero en solitario: «Aquello fue una exigencia lógica para mejorar lo que había. Esa pequeña revolución que hicimos los llamados “disidentes” ha mejorado lo que hoy en día es MBFWMadrid».

No deja de lado palabras de agradecimiento para los organziadores: «Estoy profundamente agradecido a todo el equipo de Ifema, pero nos tenemos que adaptar. Hay que estar en la onda y hacer inversiones. Estamos captando a un cliente joven y eso es gracias a la inmediatez que nos da internet. Además, los que llevamos tanto tiempo en esto tenemos que dar paso en la pasarela a los jóvenes». Roberto Verino es una marca consolidada y personalizada en el diseñador gallego, ¿quién será su relevo? «Mi hija Cristina trabaja en el área de venta on-line, marketing y comunicación, pero yo sigo creyendo que lo más importante que me va a pasar aún está por llegar. También quisiera que esto sirviera para hacer país de una vez por todas. Si pensáramos en el bien común de España nos dejaríamos de guerras cainitas». Curiosament, Verino se va de Cibeles y regresa Felipe Varela: «Yo me voy por motivos a os que él tiene para regresar. Exceptuando a la Reina, que es su mejor embajadora, él había abandonado los desfiles».

080 Barcelona, la pasarela de la calle

Como dice la alcaldesa Ada Colau, «la moda es un sector estratégico para la ciudad». El president, Carles Puigdemont, puntualiza: «Siempre con una mirada hacia el futuro». De ahí se deducen tres cosas: que al contrario de lo que ocurre en la MBFW Madrid, un evento invisible para el sector político, en Barcelona los políticos se sientan a ver los desfiles, porque con su presencia sienten que apoyan a la industria. No porque tengan intención de seguirla, a las pruebas me remito, sino porque son conscientes de que la moda no es un trapo cubriendo un cuerpo o una cosa de gente desocupada con carteras bien dotadas, es industria, es comercio y «la pela es la pela». El segundo detalle de la pasarela 080 BCN Fashion es el guiño nostálgico. En un mundo on-line, en el que sólo recibimos cartas postales de bancos, Hacienda y publicidad, ellos le hacen un quiebro gracioso al código postal de la ciudad, como en Madrid se lo hicimos un día a la diosa Cibeles. El tercero es que aprovechan para promocionar los «marcos incomparables» de Barcelona. La Prensa alucina con los lugares donde los 31 diseñadores y marcas de moda presentan sus propuestas Otoño-Invierno 2016/17. Este año le ha tocado a la bellísima casa de estilo gótico Llotja de Mar. Ayer desfilaron CARLOTA OMS. Pau Esteve, Celia Vela, Miquel Suay y TCN.