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Pamela Anderson da la bienvenida al otoño con un espectacular cabello cobrizo y revoluciona las redes

Ni rastro del rubio platino. Pamela Anderson se pasa al cobrizo por exigencias de su nuevo papel en el cine, un cambio de imagen con el que evoca a las actrices del cine europeo de los setenta

Pamela Anderson en la Met Gala 2025. Gtres

No es un simple cambio de look, sino todo un homenaje. La reciente transformación de Pamela Anderson, que ha dejado atrás su mítica melena rubia por un sofisticado tono cobrizo, tiene sus raíces en el séptimo arte. El estilista John Nollet, artífice del cambio, se inspiró en dos leyendas del cine sueco, las actrices Bibi Anderson y Liv Ullman, para concebir un estilo que es también un homenaje al cine europeo de Ingmar Bergman. El objetivo era claro: crear una imagen con profundidad, carácter e historia.

De hecho, esta decisión estética responde a las más puras exigencias del guion. La actriz norteamericana se encuentra actualmente preparando su próximo papel cinematográfico para la película Love Is Not The Answer, un proyecto que estará dirigido por el también actor Michael Cera. Este nuevo color, por tanto, no es un capricho pasajero, sino una herramienta fundamental para construir el personaje que interpretará en la gran pantalla, prometiendo mostrar una faceta muy distinta de la que el público está acostumbrado.

Así pues, el resultado es un estudiado tono cobre con profundos matices de jengibre y bronce que entierra definitivamente su icónico rubio platino de los años noventa. El color se complementa con un corte bob a capas y un flequillo de clara inspiración setentera, una combinación que ya se pudo intuir tras su aparición en la Met Gala. Se trata, en definitiva, de una imagen que busca la elegancia y la madurez.

Las claves técnicas de un cobrizo que marca tendencia

En este sentido, los expertos en coloración capilar han aplaudido la elección, destacando que el éxito del tono reside en su perfecta simbiosis con el corte. El especialista Jaymz Rigby-Marsters subraya que las melenas capeadas y con movimiento son el lienzo ideal para los cobrizos, ya que la luz incide desde distintos ángulos y potencia la riqueza de matices del color, creando un efecto multidimensional lleno de vida y profundidad.

Por otro lado, el mismo experto ofrece una recomendación clave para quienes deseen replicar este estilo partiendo de una base oscura. Aconseja evitar las decoloraciones drásticas y optar por aclarar el cabello solo uno o dos tonos. Este método permite que los pigmentos cobrizos se asienten de una forma más integrada, logrando un resultado mucho más natural y evitando la estridencia de un naranja artificial, lo que garantiza un acabado elegante y favorecedor.