Junta de Andalucía

Dos aceleradores lineales donados por Amancio Ortega, “13 meses embalados”

El PP-A llevará al Parlamento la denuncia de profesionales sanitarios de Granada por las «insostenibles» listas de espera oncológicas pese a disponer de equipos de radioterapia sin funcionar

Catalina García, durante la rueda de prensa en Granada, junto a compañeros del partido
Catalina García, durante la rueda de prensa en Granada, junto a compañeros del partidolarazon

Si es un usuario de la redes sociales, probablemente haya visto algún vídeo reciente del médico Jesús Candel, alias «Spiriman», clamando como el diablo contra Susana Díaz y los gestores de la sanidad pública andaluza. Esta concreta denuncia, y la de otros muchos profesionales de Granada, viene de atrás. No por ello deja de requerir una explicación. Y el PP-A ha dado el paso adelante porque la gravedad de la situación lo requiere. Los populares reprocharon ayer públicamente al Gobierno andaluz que mantenga «embalados desde hace trece meses» dos de los aceleradores lineales donados por la Fundación Amancio Ortega, destinados a los pacientes de oncología de la provincia. Todo ello cuando hay una importante lista de espera para recibir tratamiento de radioterapia.

Catalina García, portavoz de Sanidad del PP en el Parlamento andaluz, llevará este asunto a la Cámara. Ayer, insistió en que en la lista de espera de Granada hay «175 personas», pese a que «no puede haberla» para radioterapia. Los pacientes de oncología de Granada disponen de tres aceleradores, aunque la propuesta a la Consejería de Salud de los profesionales hace más de un año fue llegar a marzo de 2018 con cinco aceleradores en funcionamiento. «La Junta hizo oídos sordos –recuerda Catalina García– a esta demanda que ha derivado en una situación insostenible». La explicación que reciben los sanitarios de los gestores de Granada se reduce a unas «órdenes de la dirección corporativa sevillana», aseguran a este diario.

Desde el PP-A lamentan que los recursos al alcance no se pongan al servicio de los ciudadanos. Uno de los aceleradores donados por Amancio Ortega, «no estará operativo hasta el próximo verano»; y el otro «tardará un año más en funcionar» al requerir un búnker en el Virgen de las Nieves. El primero, en el Campus de la Salud, «ya podría estar en servicio», pero el búnker sigue vacío un año después. Paralelamente, tanto profesionales como ahora el PP critican la «sinrazón» del Gobierno andaluz, que «ha licitado por importe de un millón de euros el servicio de radioterapia del Virgen de las Nieves a una empresa privada». Según García, un concierto sanitario «sin publicidad».

«Es incomprensible», lamentó de nuevo la parlamentaria popular, recordando que hace más de seis meses que debió acabar la desfusión hospitalaria y la negativa de PSOE y Cs para que la Cámara de Cuentas fiscalice el coste total, como propuso Podemos.