Andalucía

La Junta desoye a los rectores con las matrículas gratis

El presidente de las universidades censura que la presidenta tome «medidas independientes» mientras negocian la nueva financiación

El presidente de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía, Eduardo González Mazo, en una reunión con la presidenta andaluza
El presidente de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía, Eduardo González Mazo, en una reunión con la presidenta andaluzalarazon

El presidente de las universidades censura que la presidenta tome «medidas independientes» mientras negocian la nueva financiación

«Con tan solo un 1,06% de presupuesto que hemos subido este año pasado, no se puede asumir esa medida». El rector de la Universidad de Cádiz, Eduardo González Mazo, es tajante en cuanto a la aplicación de la matrícula gratis en el curso siguiente para universitarios que aprueben a la primera que pretende implantar la Junta. La presidenta, Susana Díaz, lo anunció en vísperas de intervenir en el Parlamento sin contar con los rectores, que no saben ni cuándo ni cómo se ejecutará. A la espera de una reunión «inminente» con el consejero de Economía y Conocimiento, a quien compete este ámbito, los rectores evidencian de forma sutil pero contundente sus molestias por una decisión tomada a sus espaldas y en mitad de la negociación del nuevo modelo de financiación, con retraso después de incumplir el calendario para aprobarlo en diciembre pasado.

El también presidente de la Asociación de Universidades Públicas Andaluzas (AUPA) ,donde están representados los rectores de las diez universidades que conforman el sistema universitario público, reconoce que desde la Consejería se les trasladó «hace un par de meses» la intención de bonificar las tasas públicas, pero sin más detalle. De hecho, todavía están pendientes de una próxima reunión para informarse de cómo y cuándo será efectiva. Lo que tienen claro, es que con la actual aportación de la Junta –unos 1.400 millones–, sería inviable. «Tendrá que haber una partida adicional para cumplirla y que no tenga un efecto negativo en nuestra financiación», advierte González Mazo. «Todas las actuaciones que favorezcan el esfuerzo del alumnado son bienvenidas, pero también es importante que se incluyan dentro de una política común. No se entendería que esto fuera en detrimento de la financiación», puntualiza. «Esta bonificación debe incorporarse en un ámbito global para que no se vayan tomando medidas independientes».

«Debería estar incorporada en un acuerdo global de financiación de las universidades que todavía no tenemos. Se deben incluir estas actuaciones, además un mayor presupuesto. Hay que tener en cuenta que este año subimos tan solo un 1,06% con respecto al anterior», recuerda el rector de la UCA. El documento que se apruebe deberá «contemplar también el pago de la deuda, que a final de 2016 estaba en unos 230 millones».

El nuevo modelo al que se refiere González Mazo tenía que haberse aprobado en diciembre pasado, según el calendario estipulado por rectores y Junta –sigue rigiendo el suscrito en el año 2007, que ha sido prorrogado y ha incumplido los compromisos de incrementar la aportación de fondos públicos–. «No se cerró básicamente porque partía de una estimación inicial que garantizara la suficiencia financiera para desarrollar la docencia. Y las universidades son centros donde además de dar clase hay que hacer investigación y transferencia, nuestra misión va mucho más allá de dar clases».

El presidente de la AUPA reconoce que no tienen una estimación sobre la cantidad mínima que reclamarán. «Son bastantes reivindicaciones que se están ahora tasando. Por eso queríamos que todas fueran en un mismo paquete», señala en alusión a las protestas de profesores ayudantes y contratados doctores interinos que reclaman la estabilización de sus contratos, temporales algunos desde hace doce años.

En cuanto a la Junta, insiste en que «primero tenemos que sentarnos y decidir qué universidades queremos, hacia dónde vamos a avanzar en el modelo público universitario andaluz. Si de verdad quiere que se constituyan el motor de desarrollo socieconómico de Andalucía, habrá que apostar por ellas más allá de una subida de un 1,06%».

Sobre la entrada en vigor de la matrícula gratis, supone que «si lo hace en el nuevo curso, será para que se bonifique en el siguiente (el 2018/19)», algo que la presidenta no aclaró. La total desinformación mantiene a los rectores en vilo frente a un desembolso imprevisto que rondaría entre 25 y 30 millones y se calcula que beneficiaría a 30.000 alumnos sin beca. «Hacemos una valoración positiva de todo lo que sea reconocer el esfuerzo de nuestros alumnos, pero no es solo garantizar la motivación del alumnado, si no también que los centros ofrezcan los mejores servicios posibles. Este año hemos tenido un aumento pequeño de presupuesto y muchas dificultades para el reparto», lamenta.

Los docentes, de momento, han vuelto a poner la huelga encima de la mesa. El rector advierte de que «hay que buscarles una solución», que no será posible si la Junta no amplía su aportación económica: «Habrá que ver cuál es la disposición, desde luego las cuentas no salen con un 1,06% de aumento en el presupuesto».