Cádiz

Los reyes visitan el buque escuela, que parte mañana para una nueva instrucción

90 aniversario del Juan Sebastián Elcano

Don Felipe y don Juan Carlos en el Juan Sebastián Elcano junto a María Dolores de Cospedal
Don Felipe y don Juan Carlos en el Juan Sebastián Elcano junto a María Dolores de Cospedallarazon

El rey Felipe VI y su padre, el rey Juan Carlos, visitaron ayer en el Arsenal de La Carraca, en San Fernando (Cádiz), el buque escuela Juan Sebastián de Elcano para conmemorar el 90 aniversario de este bergantín-goleta en el que ellos mismos recibieron su instrucción como guardamarinas.

El Juan Sebastián de Elcano está ya alistado para partir mañana domingo desde el puerto de Cádiz en un nuevo crucero de instrucción, el número 90, que realizará después de haber sido sometido durante cinco meses a varias reformas.

Don Felipe y Don Juan Carlos pudieron despedirse ayer de la dotación del buque y conocieron el resultado de la reforma del buque, unos trabajos que han afectado a la cámara de máquinas, las habitaciones, las cubiertas, los tanques de gasóleo y agua dulce, y el casco. Acompañados de la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, los reyes quisieron así sumarse a la conmemoración del aniversario de este buque escuela que en sus más de noventa años en el mar ha navegado más de 1.744.000 millas náuticas por todos los mares del mundo en sus anuales cruceros de instrucción. Además de saludar a los ex comandantes que ha tenido el buque escuela, Felipe VI y don Juan Carlos asisitieron a la izada del gallardete del V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo, con el que emprende la conmemoración de la gesta náutica que comenzó Magallanes y completó el marino vasco Juan Sebastián de Elcano, en cuyo honor se nominó esta emblemática embarcación de la Armada española.

Durante su visita, la tripulación regaló al rey Felipe VI y al rey emérito sendos chifles –silbato usado en marinería– realizados con materiales de la propia embarcación y cuyas cajas han sido fabricadas con la madera de su cubierta.

Estos chifles, que se utilizan para transmitir órdenes en el mar, serán para ambos un recuerdo de un barco con el que la familia real mantiene una estrecha relación.

En 1928 el rey Alfonso XIII embarcó en él para hacer su viaje inaugural, entre Cádiz y Málaga, una navegación que en el 2003 volvieron a rememorar los entonces reyes, don Juan Carlos y doña Sofía. En 1958 el rey Juan Carlos I embarcó como guardamarina para realizar el XXX crucero de instrucción, con un recorrido que partió de Cádiz y visitó, entre otros países, Santo Domingo y Colombia. Su hijo Felipe VI siguió sus pasos y en 1987, siendo Príncipe de Asturias, embarcó como guardamarina para formar parte del LVIII crucero de instrucción.

Ahora, el buque escuela, considerado también una «embajada flotante» de España en los puertos de los distintos países por los que transita, afrontará un nuevo crucero de instrucción. Partirá mañana de Cádiz para ofrecer, durante seis meses y 20.000 millas náuticas, una formación integral sobre la vida en el mar a 61 nuevos guardamarinas pertenecientes a la 420 promoción del Cuerpo General y a la 150 de Infantería de Marina.