ERE

UGT revisará el uso de las ayudas y consigna 115.000 euros para «errores»

El secretario general de UGT Andalucía, Francisco Fernández Sevilla
El secretario general de UGT Andalucía, Francisco Fernández Sevillalarazon

La dirección regional de UGT en Andalucía, encabezada por Francisco Fernández, anunció ayer la constitución de una comisión interna para «clarificar todo lo publicado y hacer una revisión documental de todos los programas (de formación) para, si existe algún error en la imputación del gasto, corregirlo y reintegrarlo a la Administración correspondiente como se hace normalmente cuando hay una incidencia. Así se lo hemos comunicado a la Junta y nos ponemos a su total disposición para que revisen, aclaren o devuelvan cualquier justificación erróneamente facturada». Fernández, que recordó hasta en tres ocasiones que su equipo sólo lleva «109 días» al frente del sindicato tras la salida de Manuel Pastrana (por más que dos altos cargos y él mismo permanezcan de la anterior dirección), indicó que no le «consta» que con las irregularidades del «caso ERE» que salpican al sindicato se haya abierto otra comisión «ad hoc» pese a que la instrucción habla de más de 4,3 millones en sobrecomisiones para CC OO y UGT, sindicato, además, al que perteneció el «conseguidor» Juan Lanzas.

UGT consignará en un fondo notarial 115.000 euros para una posible restitución de partidas, aunque negó un «uso fraudulento» o el encargo de facturas falsas. Manos Limpias acusa al sindicato, para el que pide la «suspensión cautelar», de, entre otros, los presuntos delitos de malversación de fondos públicos, falsedad y apropiación al desviar subvenciones. «UGT investigará por si hubiera un error». Además, se encargará «una auditoría externa nueva». La cantidad consignada en escaso tiempo contrasta con la argumentación esgrimida para justificar el ERE en la entidad, con 187 despidos en Andalucía. El sindicato basó los ceses en la desaparición de programas para el fomento del empleo, esto es, la falta de ayudas y, por tanto, de fondos. Los trabajadores despedidos alegaron que en 2012 UGT recibió 23 millones en este concepto.

Fernández mostró la documentación que demostraría que «UGT facturó en publicidad de ese curso (dirigido a trabajadores especializados en discapacidad) 7,38 euros y no los 29.774,94 euros» publicados. «Y facturamos 4 céntimos del encarte postal», añadió. «UGT ni ha falsificado ni ha inducido a proveedores para que cambien los conceptos. Es cierto que hubo un error pero estamos hablando de que se imputó a un curso de monitores 19,56 euros. Ni uno más», dijo. Conscientes de la alarma social generada y «para garantizar la devolución de hasta el último céntimo si es que hubiese errores», indicó Fernández, «hemos constituido un fondo notarial por el importe total de la publicidad imputada al programa. No quiero decir con eso que la publicidad sea errónea sino que, con este fondo notarial, garantizamos su imputación». Fernández Sevilla recordó que en los últimos cuatro años el sindicato ha impartido 7.000 cursos de formación para 108.000 trabajadores. En la actualidad UGT-A cuenta con 93 centros acreditados para impartir dichos cursos «y contamos además con un aula bus para llegar a todos los rincones». En su programa hay más de mil especialidades de formación, el 90% presencial o semipresencial. En los últimos años, 103.000 desempleados han sido atendidos en el programa de orientación laboral, «con más de 306.000 horas de atención»; 31 centros de orientación laboral y 161 personas de media. «UGT no ha dejado de realizar ningún curso porque se haya imputado publicidad o costes irregulares. Todo ha estado justificado», indicó. El responsable sindical negó que UGT Andalucía «emplee a adolescentes» sin contrato para tareas puntuales como meter en sobres las hojas sindicales que se envían a los afiliados. «Aquí ni ha existido, ni existe ni existirá dinero negro. Nunca. Y tampoco hay adolescentes. Hay un grupo de gente que ha colaborado de forma militante, como venimos solicitando a los afiliados durante los últimos años y seguiremos haciendo. Aquí lo que se ha hecho es contar con esos jóvenes, prejubilados o trabajadores para que colaboren y se les ha dado un dinero para compensar los desplazamientos o la manutención», se defendió.