Una instrucción «confusa» de la jueza Núñez

Un juez deja sus huellas en la instrucción al tomar posiciones. La Audiencia de Sevilla ha anulado por segunda vez una decisión tomada por María Núñez en el ámbito de una de ellas: el archivo de la pieza de la «macrocausa» de los ERE centrada en los 1,3 millones que la Junta otorgó a la empresa Azucareras Reunidas Jaén. El tribunal ha estimado el recurso de apelación ovillado por la Fiscalía para determinar que declare una testigo.

En un auto, consultado por LA RAZÓN, el tribunal da la razón al Ministerio Fiscal cuando invoca que «la práctica de la diligencia testifical fue suspendida» después del carpetazo provisional al caso y de «la presentación en el juzgado del recurso de reforma», en una «actuación poco comprensible de la instructora por confusa». Ello porque «la acordó por estimarla necesaria para el esclarecimiento de los hechos y sin practicarla ni suspenderla clausuró» la causa para luego «aprovechar la admisión a trámite del recurso» de la Fiscalía para acordar que se «comunicase» el «no» a la testigo.