El cochinillo de Segovia consigue récord de ventas en los restaurantes de toda España

La calidad del cochinillo de Segovia sigue conquistando mercados, y lo mejor de todo, paladares. Este año su marca de garantía batirá récord de ventas en los restaurantes de la España autonómica.

Así lo destacó el presidente de la Asociación para la Promoción del Cochinillo de Segovia (Procose), el reconocido hostelero José María Ruiz Benito, quien avanzó que 2018 se cerrará, previsiblemente, con la cifra de 130.000 consumidos, la más alta desde la creación de esta institución.

Asimismo, remarcó la satisfacción de todos los socios de Procose por haber logrado ir «más allá de lo que estaba previsto» cuando se embarcaron hace 18 años en el primer gran objetivo: obtener la primera Marca de Garantía para esta provincia, con el cochinillo segoviano. Un hito que se logró hace 14 años.

El presidente de Procose dejó claro que el cochinillo es «la referencia de Segovia» porque los monumentos son importantísimos pero este plato es el que tiene «mayor tirón para la ciudad en turismo» porque la gente vuelve a comer porque la experiencia «se lleva en la memoria, que está muy relacionada con el estómago». Ruiz Benito afirmó que el cochinillo es además la referencia segoviana para el mundo de la gastronomía.

El gran reto de Procose, desde que lanzó el proyecto en septiembre de 2016, es lograr la declaración del cochinillo como Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de patrimonio cultural inmaterial. José María Ruiz anunció que esperan tener noticias positivas en 2019 pero que, si no se consigue el próximo año, seguirán trabajando porque «no va a faltar el tesón, la ilusión y todo el empeño» para lograr este reconocimiento.

Por su parte, el gerente de la marca, José Ramón Marinero, destacó que Procose mantiene control de calidad sobre el animal vivo, en el matadero y cuando se sirve en la mesa.

Estudio para mejorar el producto

Por este motivo, han elaborado un estudio sobre la investigación de razas de cerdo que servirá para conocer mejor el producto y para orientar a los ganaderos, mayoristas y restaurantes sobre las características y particularidades de las genéticas, para conseguir sus objetivos.

En este sentido, José María Ruiz Benito, afirmó que las figuras que protegen a los productos agroalimentarios deben tener una base sólida en cuanto a tradición lo que no es incompatible con la mejora continua de calidad y la adaptación a los nuevos tiempos.

Por ello, dentro del ADN de la Marca de Garantía está conocer cada vez más todo lo referente al mundo del cochinillo, aún poco estudiado, a través de una labor de Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i).