La economía regional crece de la mano del empleo y el esfuerzo ciudadano

La economía de Castilla y León se está comportando bien, crece al mismo al ritmo que en España y, lo que es más importante, nada hace indicar que en los próximos meses vaya a cambiar esta tendencia positiva.

La economía de Castilla y León se está comportando bien, crece al mismo al ritmo que en España y, lo que es más importante, nada hace indicar que en los próximos meses vaya a cambiar esta tendencia positiva.

Así podría resumirse la comparecencia de la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, ayer en Valladolid, para dar a conocer el informe de la contabilidad regional correspondiente al pasado año. Y es que pesar de la leve desaceleración de los últimos tres meses de 2016, y de las incertidumbres que plantea el Brexit, la política proteccionista de Trump en EEUU, una posible subida de los tipos de interés o el precio del petróleo, la consejera se muestra optimista de cara a este año y asegura que nada le hace pensar en que no se vaya a mantener el 2,5 por ciento del PIB de crecimiento previsto.

Del Olmo explicaba que las expectativas de los empresarios son buenas para los próximos meses y que, además, los ciudadanos de entre 16 y 44 años ven el futuro también con optimismo. Algo que la consejera ponía en valor al bromear con la habitual naturaleza «realista» y «pesimista» del castellano y leonés.

Los datos de la contabilidad regional revelan que la economía creció el pasado ejercicio un 3,2 por ciento, dos décimas más que en 2015, gracias al empuje del sector primario y del industrial, con especial hincapié en las ramas alimentaria y de material de transporte, pero también y sobre todo al esfuerzo y a la confianza de los castellanos y leoneses.

Un hecho que se pone de manifiesto con el repunte del 3,3 por ciento de la demanda interna, que la consejera achacaba a que hay más gente trabajando (se han creado 30.913 empleos en 2016 -un 1,2 por ciento más- y se ha reducido la tasa de paro al 15,8), o a que los hogares de esta Comunidad tienen más renta disponible para poder gastar también por la bajada del IRPF.