Hacienda

La Iglesia llama a marcar las dos X en el IRPF ante el descenso de recaudación

La Archidiócesis y Caritas de Valladolid han insistido este viernes en marcar las X a favor de la Iglesia Católica y de otros fines sociales en la Declaración de la Renta para ayudar "el doble"sin pagar más ni recibir menos, tras una caída del 0,38 por ciento en los resultados obtenidos en la campaña del pasado año, es decir, 95.537 euros menos de recaudación. El General de la diócesis de Valladolid, Luis J. Argüello, que ha presentado la campaña 'Xtantos', ha señalado la importancia de asignar el 0,7 por ciento de los impuestos ciudadanos al mantenimiento de la Iglesia Católica ya que este impuesto es "una demostración de democracia fiscal".

Argüello ha señalado que a partir del 7 de abril de 2015 los contribuyentes ya pueden presentar por Internet el borrador de la Renta y ha resaltado la "importancia"que tiene este periodo para el sostenimiento de la Iglesia a través de las casillas 105 destinada a la Iglesia Católica y 106 dirigida a otros fines sociales.

El general de la Diócesis ha estado acompañado del ecónomo diocesano, José María Conde Pobes, quien ha explicado que el pasado año hubo 366 declaraciones menos con asignación a favor de la Iglesia Católica, lo que ha supuesto un importe de 95.537 euros menos para la institución.

El "principal disgusto"de la Iglesia Católica subyace en el 29 por ciento de contribuyentes que el pasado año no marcaron ninguna casilla ya que este acto supuso que se quedasen sin asignar 280 millones de euros en la casilla de la Iglesia y 222 millones en la de Fines sociales.

A esto se suma su preocupación por aquel sector de los contribuyentes que están exentos de hacer la declaración de la renta por no llegar al umbral mínimo obligatorio pero que indistintamente contribuyen mensualmente al IRPF a través de su cotización, ya que estos no tiene la posibilidad de decidir destinar su dinero a la labor de la Iglesia.

De igual forma, Argüello ha expresado su deseo de que otras partes del presupuesto fuesen decididas por los propios ciudadanos para cultivar otras dimensiones de la vida de las personas.

Por su parte, el delegado de Cáritas Diocesana de Valladolid, José García Gallo, ha remarcado que este organismo recibió 245.000 euros procedente de la Asignación Tributaria para Fines Sociales del IRPF en 2014, cantidad que le ha permitido ejecutar once programas sociales.

Sin embargo, García Gallo ha explicado que existe una "sutil diferencia"entre Cáritas y la Iglesia ya que para que su institución reciba dinero debe presentar programas que competirán con los de otros organismos sociales para ser aprobados, lo que se denomina congruencia competitiva.

La cantidad de dinero que recibe Cáritas de la X de la Renta supone algo menos del 10 por ciento de su presupuesto general, el cual se divide en varias partidas. En concreto, el pasado año se destinaron 63.000 euros a la exclusión social, 28.000 a personas mayores, 39.000 a la defensa de la mujer, 59.000 a los jóvenes sin empleo y 27.000 a las minorías sociales.

Argüello por su parte, ha explicado cómo se financia la Iglesia de Valladolid cuyas principales fuentes son dos: las aportaciones directas, que suponen el 75 por ciento del presupuesto anual de la Archidiócesis, entre las que se encuentran las colectas, los donativos o las herencias, entre otras; y la asignación tributaria de la casilla 105 a través de la que se recibe el 25 por ciento de su presupuesto anual.

El general de la diócesis ha resaltado que la asignación tributaria que conlleva marcar la casilla 105, no va destinada a servicios sociales que presta la Iglesia tales como la educación concertada, la sanidad católica--como el Hospital del Sagrado Corazón de Valladolid- o la reparación y mantenimiento de los templos de culto, sino que estas prestaciones son cubiertas por la parte del presupuesto que destina la propia administración pública a los mismos.

José María Conde Pobes ha resumido la historia de la financiación de la Iglesia Católica que comenzó con una asignación tributaria del 0,52 por ciento en 1988 y que finaliza en 2007 con la que entrada en vigor del nuevo modelo de financiación por el cual se suprime la dotación directa del Estado y se asigna a la Iglesia el 0,7 por ciento del IRPF a quienes marquen la casilla correspondiente.

La fiscalidad actual de la Iglesia también ha tenido su espacio en esta conferencia. El ecónomo de la diócesis ha remarcado que la Iglesia paga el IVA en todas sus obras y suministros y que de lo que están exentos es del IBI.

Sobre este asunto, ha penalizado la "crítica"que se hace "habitualmente"a la Iglesia por este motivo ya que la exención del IBI no es un privilegio de esta institución, sino que afecta a todo el sector no lucrativo y por ello ha remarcado que otros edificios de la administración pública como el Ayuntamiento o los centros cívicos tampoco pagan este impuesto, así como los edificios que los bancos tienen vinculados a fundaciones sociales.