Castilla y León

Más patrullas para combatir los avisos de controles entre los conductores

La Guardia Civil intensificará, a partir de ahora, las retenciones aleatorias para realizar test de alcoholemia

Vehículos parados por la Guardia Civil en Valladolid para realizar un control de alcoholemia y drogas
Vehículos parados por la Guardia Civil en Valladolid para realizar un control de alcoholemia y drogaslarazon

La Guardia Civil intensificará, a partir de ahora, las retenciones aleatorias para realizar test de alcoholemia.

La aparición de aplicaciones donde los conductores informan de controles de alcoholemia, de velocidad o de la presencia del helicóptero «Pegasus» para alertar a otros usuarios, están obligando a la Guardia Civil a replantearse la estrategia en el establecimiento de controles preventivos, especialmente en los de alcoholemia y drogas.

El teniente coronel Rafael Aparicio, jefe del Sector de Tráfico de Castilla y León, confirmó una reciente directriz operativa para contrarrestar los efectos de estos avisos por Whastapp y redes sociales incrementando el número de controles «dinámicos» tanto en las vías de gran capacidad como en las convencionales.

Aparicio, que explicó que este dispositivo se tendrá que coordinar con las distintas jefaturas provinciales de la Dirección General de Tráfico (DGT), resaltó que sólo se trata de lograr más eficacia en los controles de vigilancia, que es realmente la demanda de la sociedad para mejorar la seguridad vial.

Con el nuevo sistema de vigilancia, cualquier vehículo podrá ser parado por una patrulla en movimiento, que se situará detrás de él en la carretera. Una vez detenido, uno de los agentes someterá al conductor al control de alcoholemia o de drogas, o a ambos. No es necesario que existan indicios, los agentes pueden hacer estos controles de forma aleatoria o selectiva y en cualquier carretera, al igual que viene ocurriendo ahora con los dispositivos de vigilancia tradicionales con patrullas estacionadas en un punto concreto.

Con estos nuevos controles desde la Guardia Civil se quiere lanzar el mensaje de que los conductores que se saltan las normas no están al margen de la ley a pesar del uso de estas nuevas aplicaciones, y que el alcohol y las drogas, como todos los años demuestran las estadísticas de siniestralidad en carretera, no son compatibles con la conducción segura.

Pero la preocupación por estas redes sociales no es exclusiva de la Guardia Civil de Tráfico, también desde la Policía Nacional se alerta de que estos avisos se convierten en muchas ocasiones el aliados de delincuentes y terrorista para evitar controles.

Avisar de un control policial no es nada nuevo. Durante décadas, los conductores alertaron de la presencia de la Guardia Civil con ráfagas de luces de carretera, algo que el Reglamento General de Circulación se encargó de ilegalizar a partir de enero de 1992. Ahora, la utilización de las redes sociales para este fin no está prohibida, lo que conlleva mayor número de accidentes.