Política

Castilla y León

Ponen en marcha un atractivo proyecto familiar de enoturismo en Mélida

Impulsado por la enóloga Silvia Herrera, la iniciativa une el vino ribereño y la gastronomía de la zona con el alojamiento

La enóloga Silvia Herrera presenta el proyecto enoturístico «Mélida Wines»
La enóloga Silvia Herrera presenta el proyecto enoturístico «Mélida Wines»larazon

Más ilusionados que el primer día, tras más de dos décadas de trabajo y dedicación al turismo rural en la ribera del Duero, aportando su granito de arena para dinamizar la economía de esta zona.

Así se enfrenta la Familia Herrera, natural de Mélida, con el nuevo y atractivo proyecto de enoturismo que ponen en marcha en este pequeño municipio vallisoletano de apenas medio centenar de habitantes, situado a tres kilómetros de Peñafiel.

Una iniciativa, la más íntima y personal de la familia, que culmina veinte años de experiencia en el sector, en los que han desarrollado cuatro casas rurales en Mélida; un Museo de la Harina y la Miel en Olmos de Peñafiel; y otro proyecto, denominado 1500 Estrellas, que ofrece dos camas de diseño vanguardista al aire libre en pleno monte. Un lugar desde donde disfrutar de unas vistas excepcionales. Desde el Valle del Botijas al castillo de Peñafiel pasando por las Bodegas Valpincia y Pago de Carraovejas y las casas abigarradas de Mélida.

«Mélida Wines», es el nombre escogido para esta ambiciosa experiencia, que une el vino ribereño y la gastronomía de la zona con el alojamiento. La enóloga Silvia Herrera, hija del que fuera hasta hace pocos años presidente de la Asociación Española y de Castilla y León de Turismo Rural, Javier Herrera, lidera este proyecto enoturístico, aún en ciernes, que espera ver la luz dentro de un año.

En una casona de Mélida, ahora en ruinas, levantarán dos apartamentos rurales además de un restaurante, en el que las conservas gourmet del mar y la tierra serán la base. También abrirán una tienda de ultramarinos, donde el cliente podrá degustar y llevarse productos de la zona, y crearán una bodega en la que pretenden elaborar vinos de calidad con una tirada pequeña, de aproximadamente 60.000 botellas.

El vino será el protagonista de este proyecto, ya que además de catas personalizadas, se creará un Club de Barrica, en el que el mismo cliente podrá elaborar su propia cosecha, escogiendo la uva y eligiendo la barrica e incluso el tiempo de maduración.