Política

Barcelona

El independentismo activa su «otoño caliente»

La sociedad civil separatista intensificará desde hoy su presencia en la calle.

Imagen de los coches de la Guardia Civil destrozados tras la concentración del 20-S ante la conselleria de Economía. Foto: Efe
Imagen de los coches de la Guardia Civil destrozados tras la concentración del 20-S ante la conselleria de Economía. Foto: Efelarazon

La sociedad civil separatista intensificará desde hoy su presencia en la calle.

La ronda de movilizaciones –bautizada como «otoño caliente»– promovida por el independentismo para conmemorar las principales efemérides del «procés» ha arrancado de forma contenida, pero amenaza con desatarse a partir de hoy, con motivo de la concentración prevista ante la Conselleria de Economía en recuerdo a la jornada de registros de la Guardia Civil en distintas sedes del Govern para frenar el referéndum ilegal del 1 de octubre. Aquella protesta, alentada por la ANC y Òmnium Cultural –lo que ha costado a sus respectivos líderes, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, la acusación de sedición y la prisión preventiva–, cercó el edificio del departamento de Economía mientras se encontraban en el interior los agentes de la Benemérita y acabó con el destrozo de sus coches, que se encontraban a las puertas.

Hasta ahora, el independentismo demostró su músculo con una manifestación masiva en la Diada, pero, pese a las previsiones, no ha tenido continuidad más allá de una reducida acampada que han organizado un grupo de independentistas en la plaza Sant Jaume. La protesta de hoy, en cambio, se prevé multitudinaria y podría desencadenar la movilización permanente. Los participantes así lo invitan a pensar: más allá de la presencia del Govern en bloque con el president Quim Torra a la cabeza y de los partidos políticos independentistas, la manifestación ha servido para volver a despertar a organizaciones como Universitats per la República, que ya durante la fase final del «procés» tuvo un papel decisivo en la cascada de movilizaciones y caos que hubo en Barcelona, y hoy ha hecho un llamamiento a regresar a la calle –por la mañana han impulsado una pegada de carteles por diferentes universidades públicas, y por la tarde, antes de ir hacia Gran Vía con Rambla Catalunya (donde está ubicada la Conselleria de Economía), han llamado a acudir a la jornada de puertas abiertas en la sede de la CUP–.

La agenda de Universitats per la República no concluirá ahí y mañana anunciarán una lista de actividades que amenazan con ir en la línea de las del año pasado para tomar las calles y colapsar algunas arterias centrales de Barcelona. Pero no solo los universitarios independentistas intensifican sus actividades, sino que también lo harán en los próximos días los CDR –que han apretado el ritmo de sus asambleas para preparar protestas–, la CUP y la ANC. Los anticapitalistas han activado desde hoy sus 19 asambleas territoriales para abordar cómo encarar el futuro más inmediato ante la «desorientación» que, a su juicio, ven en el Govern y en JxCat y en ERC: reprochan «opacidad» en la toma de decisiones, la renuncia a desobedecer la legalidad y una deriva «neoliberal» en la gestión de la Generalitat. La ANC, por su parte, debatirá este sábado un documento en el que abordarán si aprietan las tuercas al Govern de Torra para que diseñe una hoja de ruta para desplegar la República o se aparte y convoque elecciones. En este sentido, la presidenta de la entidad, Elisenda Paluzie, ya leyó la cartilla al president en la Diada y advirtió de que tenía que poner de su parte para lograr la ruptura.