Política

Crisis en el PSC

La lucha fratricida del PSC amenaza las primarias de Barcelona

La alcaldía es una oportunidad de huir del caos de la calle Nicaragua

La lucha fratricida del PSC amenaza las primarias de Barcelona
La lucha fratricida del PSC amenaza las primarias de Barcelonalarazon

BARCELONA- El cuartel de los socialistas catalanes, en la calle Nicaragua, es estos días un lugar desagradable donde se libran guerras fratricidas entre la dirección del partido y los críticos. Es un lugar donde la tensión se puede cortar con un cuchillo, del que quien más quien menos huye para esquivar el malestar que se respira. Es el caso de las jóvenes Laia Bonet y Rocío Martínez-Sampere, que abandonaron la ejecutiva la semana pasada por discrepancias con la dirección, pero también para encontrar una oportunidad en Barcelona. Ninguna de las dos sintoniza con la dirección y busca en las primarias una salida a su carrera política.

Para ser candidato a las primarias de donde saldrá el alcaldable del PSC de las municipales de 2015, hay que dejar temporalmente los cargos orgánicos del partido, como en su día hizo Jordi Martí, presidente del grupo municipal de los socialistas catalanes en el Ayuntamiento de Barcelona, y hará Jaume Collboni, que hoy, a las 11.15 horas inscribirá su precandidatura en la sede de la Federación de Barcelon.

Hoy se estrena el proceso de las elecciones primarias. Se abre el plazo para inscribir las candidaturas y recoger los avales. Los aspirantes deben reunir el aval de 18 a 25 miembros del consejo de la federación del PSC o de 150 a 200 militantes, además de entre 1.000 y 1.500 firmas de residentes en Barcelona mayores de 16 años y que no sean necesariamente miembros del PSC. Tienen hasta el día 1 de marzo para conseguir el reto, que a la vez es una oportunidad para dar a conocerse entre los barceloneses. Una vez acabe la recogida de apoyos, el 8 de marzo se proclamarán los candidatos que hayan logrado los avales, el 10 empezará la campaña de las primarias y la votación será el 29 de marzo, aunque si ningún candidato logra un 40 por ciento de los votos con un diferencial de más del 10 por ciento sobre la segunda candidatura, en siete días se celebrará una segunda votación con los dos aspirantes que hayan recibido más votos.

Y para estrenar el proceso de primarias, para hoy hay programados varios actos. El más serio es la presentación de las precandidaturas a la que acudirán los seis nombres que quieren ser alcaldables Bonet, Collboni, Martí, Martínez-Sampere, la concejal de Nou Barris, Carmen Andrés, y el médico y militante socialista del Eixample, Manuel Fernández. El más cómico, el de Martí. Un año y diez meses después de relevar a Jordi Hereu como presidente del grupo municipal del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, Martí presenta una campaña bajo el título de «Quí carai es Jordi Martí?», consciente de que es un perfecto desconocido –el último barómetro del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat corrobora que apenas lo conoce un 19,2 por ciento de la población–.

Martí se llama a sí mismo «outsider» del PSC. Enmarcado en el sector crítico, abandonó la dirección, se ha desmarcardo de la postura oficial en la consulta y ha firmado el manifiesto para evitar la expulsión de los tres diputados díscolos del partido. También Bonet y Martínez-Sampere discrepan de la dirección. Las primarias quieren ser un revulsivo para el PSC, pero pueden convertirse en una batalla entre dos sectores que hundan más al partido.

Jaume Collboni

Portavoz del PSC

Este joven dirigente afín al primer secretario del PSC, Pere Navarro, parte como un de los aspirantes favoritos

Martínez-Sampere

Diputada crítica

No ha confirmado aún su precandidatura. Buscaría en Barcelona una oportunidad, tras diferencias con la cúpula

Laia Bonet

Ex diputada crítica

Enmarcada en el sector crítico, dejó la ejecutiva del partido la semana pasada. Apuesta por renovar las izquierdas