Conciertos

Paquito d’Rivera vuelve a unir jazz y clásica en el Palau de la Música

Paquito d’Rivera ayer en el Palau
Paquito d’Rivera ayer en el Palaularazon

Dos elefantes se encuentran a punto de celebrar sus cumpleaños. «¡Viejo, qué vas a hacer tú para celebrarlo!», le pregunta excitado uno al otro. «Pues pienso llevar a mi papá y a mi mamá y a todos mis amigos a la playa y bañarnos y pasarlo en grande. ¿Y tú?», contesta alegre. «Pues yo voy a dejarme las pestañas larguísimas y pintarlas de espanto», contesta el otro elefante. «¿Y eso?», pregunta su amigo con la trompa torcida . «Naaa, mariconerías mías», contesta.

Ésta es una de las historias guasonas que Paquito d’Rivera siempre le gusta explicar cuando habla de Ernesto Lecuona y sus «lecuonerías», el más importante de los compositores cubanos, y al que rinde homenaje en su última composición, que este sábado estrena en Europa en el Palau de la Música dentro del Festival de Jazz.

El maestro clarinetista y uno de los hitos del latin jazz de las últimas décadas regresa al Palau junto a la Orquestra Simfònica del Vallès y al pianista Pepe Rivero para presentar un programa que incluye su «Cape Cod Concerto»; la «Obertura Cubana» y «Un americano en París», de George Gershwin; y «Conga de fuego», de Alberto Márquez. «Mi padre era un saxofonista clásico, pero nunca tuvo la habilidad de improvisar, aunque le encantaba el jazz y Stan Getz. Él me iluminó en los dos mundos y la escritura y me encanta mezclarlos», asegura D’Rivera.

Su «Cape Cod Concerto» está dividido en cuatro movimientos. El primero, «Benny», está dedicado a Benny Goodman, el primer héroe de D’Rivera. El segundo, «Bandoleón», es básicamente una milonga. El tercero, «Lecuonerías», está basado en improvisaciones al clarinete de temas compuestos por Erenesto Lecuona. Y el cuerto, «Chiquita Blues», está dedicado a Chiquita Facenda, una corista de principios del siglo XX «que tuvo una vida amorosa muy intensa, aunque nunca me explicaron cómo lo hacía, algo que me gustaría mucho saber», comenta el músico.

Chucho Valdés en Sant Cugat

Por su parte, el pianista Chucho Valdés, padrino del Festival de Jazz, actuará en esta edición en tres conciertos diferentes. La primera cita del cubano es esta noche en el Teatre-Auditori de Sant Cugat, en un concierto en el que estará acompañado de sus dos hijos menores, Leyanis y Jessie. El sábado actuará en el Sant Jordi Club, como invitado especial de Txarango. Y el domingo cerrará la fiesta en solitario con su piano en el Teatre Joventut L’Hospitalet. «Lo que más me gusta de mi familia es que están haciendo su propia música, con su propio estilo», dice de sus hijos.