Cataluña

Pleno de divisiones

CDC y ERC votan distinto ahora por los conciertos a las escuelas de elite. JxSí y la CUP constatan discrepancias en los presupuestos

Junqueras y Puigdemont en una imagen durante el pleno
Junqueras y Puigdemont en una imagen durante el plenolarazon

El PSC y Catalunya Sí que es Pot buscaron ayer las cosquillas a Junts pel Sí. Y las encontraron con sendas mociones que pusieron en evidencia divergencias entre los socios de la coalición y entre la coalición y la CUP, partido en quien el gobierno catalán confía para sacar adelante sus presupuestos. «Soy de los optimistas que creen que habrá presupuestos», decía el president de la Generalitat hace dos días coincidiendo con la celebración de cien días al frente del Govern. Pero ayer la CUP y la coalición que lidera Puigdemont votaron diferente hasta en una veintena de puntos de sendas mociones de la izquierda –PSC y CSQP– sobre política fiscal y presupuestaria.

Socialistas y podemitas alegaron que pretendían buscar espacios de encuentro de cara a negociar los presupuestos. Pero a la presidente del Parlament, Carme Forcadell, no le gustó que presentaran mociones «casi idénticas», que repetían la mayoría de los puntos y les invitó en un futuro a incorporar transacciones en único documento. De esta manera se hubiera evitado la imagen de JXsí y la CUP votando diferente en cuestiones presupuestarias que tienen que negociar inminentemente. Los antisistema discrepan de JxSí en temas como la reforma del impuesto de sucesiones o la reducción de los cargos de confianza.

La CUP apoyó medidas para pedir al Estado una prórroga del impuesto de patrimonio previo a un tributo sobre grandes fortunas o reducir los tipos impositivos a las rentas más bajas a las vez que se aumenta la presión a las más elevadas. Pero JxSí votó en contra y las medidas no prosperaron.

Aunque la votación que causó más revuelo fueron otras dos mociones, también del PSC y de CSQP, que constataron diferencias dentro de la coalición de Junts pel Sí. Los conciertos a las escuelas de elite que segregan por sexo volvieron a dividir a CDC y ERC.

Junts pel Sí dio libertad de voto a sus diputados, como sucedió en la petición para derogar la reforma laboral y para retirar el monolito franquista que hay en Tortosa. La moción del PSC y CSQP solicitaba en dos puntos concretos rescindir los conciertos a este tipo de centros educativos que segregan por sexo, pertenecientes al Opus Dei. ERC, algunos independientes y los tres diputados de Demòcrates de Catalunya, a favor de quitar las ayudas públicas a estas escuelas, se abstuvieron, mientras que CDC votó en contra.

Un «error» de Ciutadans, en palabras de su portavoz, Carlos Carrizosa, y la división de Junts pel Sí favoreció que las mociones prosperaran. El Parlament de Cataluña votó a favor de retirar los conciertos a las escuelas religiosas que separan por sexo. Ciutadans quería abstenerse, pero votó a favor de ambas mociones. Carrizosa trató de explicar que había habido una confusión, pero el portavoz popular, Enric Millo, le reprochó que habían cometido el «error» dos veces, en las dos votaciones que hubo.

CDC y ERC también votaron diferente un punto de una moción del PP que instaba a mantener los contratos con centros sanitarios privados cuya actividad no es posible asumir por parte del sistema sanitario integral de utilización pública de Cataluña. El punto no prosperó. ERC se opuso y CDC votó a favor.

El de ayer fue un pleno alambicado. Además de producirse un empate en una moción que obligó a repetir tres veces una votación, el Parlament rechazó reducir los grados universitarios de cuatro a tres años esta legislatura y acordó iniciar en septiembre un debate sobre el modelo universitario de «la futura república catalana».