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Medio Ambiente

Diez años vertiendo aguas fecales al Manzanares

La alcaldesa de Getafe (PSOE) tendrá que declarar ante el juez por vertidos de aguas residuales.

Imagen del vertido de Perales del Río
Imagen del vertido de Perales del Ríolarazon

La alcaldesa de Getafe (PSOE) tendrá que declarar ante el juez por vertidos de aguas residuales.

Las aguas fecales y residuales sin tratar que se vierten en el barrio de Perales del Río en Getafe acaban en el Río Manzanares desde hace al menos 10 años. Ahora, el partido Impulsa Getafe, tras interponer una querella, ha conseguido que la alcaldesa de la localidad, Sara Hernández, del PSOE, tenga que ir a declarar como investigada el próximo día 9 de enero junto al concejal de Sostenibilidad, Jorge Juan Rodríguez, también del partido socialista, por estos hechos.

En la querella judicial se incide en el «grave daño ambiental» que producen los vertidos en el río, lo que afecta «directamente» a la calidad de vida de los vecinos del barrio de Perales del Río y al «lamentable estado de conservación» de uno de los «pulmones del sur de Madrid», en referencia al Parque Regional del Sureste.

Según contaron fuentes de Impulsa Getafe a este medio, los vertidos se producen debido a que las aguas residuales llegan a una estación de bombeo que lleva cerca de una década inutilizada. La estación debería transportar esas aguas a la depuradora, pero al no hacerlo, éstas evacuan por una tubería que crea un arroyo de unos 500 metros hasta el Manzanares. Miembros de este partido llevaban casi un año filmando la escena y denunciándolo públicamente sin recibir respuesta. Cansados de esperar, decidieron ir a los tribunales ante la inacción del consistorio.

Por estos hechos, la Confederación Hidrográfica del Tajo habría multado al consistorio solo el año pasado con más de 45.000€. Además, en los últimos tres años la cuantía se elevaría a más de 100.000€, sin contar con las multas de años anteriores de las que se desconoce la cifra, aunque desde Impulsa Getafe consideran que «se podría duplicar». Asimismo, los vecinos se quejan del mal olor constante que sufren y de las plagas de mosquitos que todos los veranos se producen en la zona por culpa de los vertidos. A eso se suma el que los vecinos no pueden hacer uso del río dado su estado y suciedad, todo ello en relación con la pérdida del hábitat y la biodiversidad de la zona.

La alcaldesa y el concejal se mostraron «tranquilos» ante las acusaciones al remarcar que son el «único Gobierno» que realmente «ha hecho algo» para solucionar la situación. Ambos se refieren a un proyecto del año 2016 que pretendía iniciar las reformas de las elevadoras de la estación de bombeo Perales del Río I-II, que, sin embargo, tres años más tarde no ha comenzado pese a estar en varios presupuestos municipales.

Por su parte, el presidente de Impulsa Getafe, Roberto Benítez, achacó al consistorio su «dejadez de funciones» y criticó que «han tenido tres años para hacerlo», prefiriendo, en cambio, levantar las aceras «de medio Getafe» como «propaganda electoral» con vistas a las elecciones municipales de mayo de 2019, con un coste de 1,5 millones de euros. Por otro lado, la oposición, en este caso, el PP de Getafe, pidió de mano de su presidente, Rubén Maireles, la dimisión de la alcaldesa «al estar imputada», además de «por dignidad, responsabilidad y coherencia propia».