Operación Policial

La Policía detiene en Madrid a dos personas que asaltaban a ancianas para robar sus domicilios

La Policía Nacional ha detenido en Madrid a dos personas que seguían a más de una veintena de ancianas hasta sus casas, momento en el que las asaltaban, amenazaban y robaban en sus domicilios. Se les acusa de 12 asaltos y otros 14 posibles. En concreto, los detenidos seleccionaban a sus víctimas en la calle y las seguían hasta la puerta de sus casas, donde las amenazaban si no entregaban sus pertenencias, "llegando incluso a atarlas, amordazarlas y vendarles los ojos", ha detallado la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes durante una rueda de prensa sobre la operación policial.

Tras esta detención se han recuperado más de 350 piezas de joyería

y más de 24.000 euros procedentes de su venta ilegal. A su vez se ha procedido también a arrestar a una mujer que adquiría ilegalmente las joyas en una casa de compra venta del distrito Centro de Madrid.

Asimismo, se ha procedido a la detención de una tercera persona, Dolores María G.C. de 44 años de edad, por un delito de receptación. La arrestada, que regentaba una casa de compra venta de oro situada en el distrito centro de Madrid, adquirió en más de una ocasión joyas

a los dos detenidos sin observar los requisitos exigidos a estos negocios comerciales, como la identificación de los compradores o su inscripción en un libro registro de policía.

Hasta el momento se han esclarecido 12 robos cometidos en distintas zonas de Madrid y se investiga su participación en al menos otros 14, ha indicado el jefe superior de la Policía de Madrid, Alfonso José Fernández Díaz.

Sorprendidas al abrir sus casas

Las investigaciones se iniciaron tras relacionar varios robos, cometidos en distintos lugares de la capital y con el mismo procedimiento, en los que las víctimas eran mujeres de avanzada edad mayores.

Los dispositivos de vigilancia establecidos permitieron identificar a los presuntos autores de los asaltos, dos jóvenes que fueron identificados en la vía pública a quienes se intervino dinero en efectivo y joyas cuyo origen no pudieron acreditar. Los agentes iniciaron entonces la búsqueda de los propietarios de las joyas decomisadas.

Posteriormente averiguaron que muchas de ellas habían sido denunciadas por robos acaecidos en los distritos madrileños de Ciudad Lineal, Carabanchel o Fuencarral, entre otros.

Además de reconocer los objetos, algunas víctimas lograron identificar a los agresores y describir el 'modus operandi' empleado por los ladrones. Los delincuentes previamente elegían a las futuras víctimas cuando salían de los bancos o de los comercios.

Entonces, uno de ellos accedía detrás de las víctimas en el portal, para poco después entrar el segundo compinche y entre los dos, abordarlas súbitamente a la entrada de su domicilio. Todas sus víctimas eran mujeres mayores de 60 años.

Detenidos "in fraganti"

Posteriormente, los investigadores detectaron a los dos jóvenes investigados cuando accedían a una casa de compra venta de oro del centro de Madrid.

Tras ello, los agentes inspeccionaron el local y encontraron que la mujer que lo regentaba llevaba escondidas en una de sus botas joyas por un peso de 253 gramos, reconociendo que se las había comprado a los dos investigados y que había pagado por ellas 5.940 euros, todo ello sin observar los requisitos legales que se exigen a estos negocios comerciales. La mujer fue detenida por receptación.

El dispositivo de vigilancia desplegado en torno a los individuos investigados culminó con su detención instantes antes de asaltar a una mujer. En el momento del arresto opusieron una gran resistencia a los agentes, a pesar de lo cual fueron finalmente reducidos. Una tercera persona propinó un gran golpe a los agentes, consiguiendo fugarse.

En los registros realizados en sus domicilios de los detenidos se recuperaron más de 250 joyas entre pulseras, esclavas, relojes, anillos, gargantillas, etcétera, así como 11.225 euros. La Policía ya ha devuelto la mitad a sus legítimos dueños. Los apresados han ingresado ya en prisión.

La investigación de la Jefatura Superior de la Policía continúa abierta, puesto que queda por detener al tercer hombre que consiguió huir y al marido de la mujer supuesta receptadora de la mercancía, que en el momento de la operación policial se encontraba fuera de España. Ambos están perfectamente identificados y se espera una pronta detención.

Cifuentes ha felicitado a la Policía, especialmente a los agentes de la Brigada de la Policía Judicial de Madrid, porque con estas detenciones se ha acabado con un grupo que está causando una "gran alarma"en un colectivo tan vulnerable como el de las personas mayores.

En el mismo sentido, el jefe superior de la Policía ha indicado que estos robos suponían además un ataque a la salud de las personas, puesto que ante un hecho de este tipo podría sufrir graves caídas o ataques al corazón. Así, para evitar posibles fallecimientos, se aceleró la operación policial.