Conflictos laborales

Parla se llena de basura por los impagos del Ayuntamiento

El Consistorio tiene una deuda de seis millones con los servicios de limpieza. Cinco adjudicatarias distintas han gestionado las basuras en esta legislatura

Debido a la huelga, la basura se amontona en los puntos limpios en buena parte del municipio e incluso se ha llegado a incendiar
Debido a la huelga, la basura se amontona en los puntos limpios en buena parte del municipio e incluso se ha llegado a incendiarlarazon

Se le acumulan los problemas a la nueva alcaldesa de Parla, Beatriz Arceredillo. Hace unas semanas, las trabajadoras de la limpieza municipal, un total de 160, se pusieron en pie de guerra contra el Ayuntamiento. La causa principal eran los impagos de las últimas nóminas que estaban sufriendo por parte de su empresa, Linorsa, que justifica los retrasos por la cantidad que le adeuda el Consistorio. En concreto, el Ayuntamiento le debe a la empresa cuatro mensualidades –desde agosto a noviembre–, más de un millón de euros. Ahora se han sumado a las concentraciones los trabajadores de la limpieza viaria y recogida de basuras, protestas que han convertido el municipio en un estercolero.

En 2013, el Consistorio adjudicó la prestación del servicio de las dependencias municipales y colegios públicos a la empresa Linorsa. El pasado 20 de junio, con José María Fraile todavía como alcalde, se le mejoró las condiciones del contrato al añadirle un colegio más al servicio. Por esas fechas empezaron los problemas con las trabajadoras, cuando la paga extraordinariales fue abonada con retraso. Pero fue en octubre cuando las limpiadoras dejaron de cobrar sus nóminas, por lo que comenzaron sus protestas frente a la casa consistorial.

El 14 de noviembre, aprovechando la afluencia de medios por la investidura de la nueva alcaldesa, las trabajadoras se personaron en el pleno municipal con pancartas para exigir una explicación a la regidora. Arceredillo prometió que se haría cargo del conflicto, aunque aclaró que no puede obligar a la empresa a pagar a sus trabajadoras con lo que reciba del Ayuntamiento. Las limpiadoras desconvocaron la huelga prevista para el 24 de noviembre por la buena disposición de Arceredillo. Unos días después de la celebración del pleno, el Ayuntamiento pagó la segunda parte del mes de julio a Linorsa, pero no el resto. La alcaldesa insistió en que el Ayuntamiento está al corriente de pago, pues paga a la empresa 256.000 euros mensuales con un margen de tres meses de retraso sin que debiera verse afectada la prestación del servicio. Sin embargo, en los pliegos esa condición de forma de pago no aparece.

186 euros de octubre

Por su parte, Linorsa pagó a mediados de mes a sus empleadas el 20 por ciento correspondiente a octubre, apenas 186 euros de su nómina, según explicó Olga Gutiérrez, responsable de limpieza de edificios y locales de CC OO de construcción y Servicios de Madrid. El pasado noviembre, las trabajadoras seguían sin cobrar octubre y se sumaba una mensualidad más. Por esta razón, se unieron nuevamente a la huelga que habían iniciado los compañeros de otros centros. En el pleno del día 28, tanto el portavoz de UPyD como el del PP preguntaron sobre el asunto a la alcaldesa, la cual respondió con evasivas. Las limpiadoras allí presentes pidieron la incautación de la fianza depositada por la empresa para hacer frente al pago de sus salarios, una solución que la regidora descartó.

No obstante, a principios de diciembre, Beatriz Arceredillo anunció que negociará con otras adjudicatarias para que el servicio cambie de manos. «La empresa que actualmente tiene adjudicado el servicio no es capaz de hacer frente al pago, e independientemente de que el Ayuntamiento de Parla haga un esfuerzo económico para pagarles, la empresa no se compromete a que con ello vaya a pagar a todas las trabajadoras», explicó Arceredillo. Las condiciones de los pliegos especifican que el Ayuntamiento puede proceder a la resolución del contrato con Linorsa por faltas muy graves como «el incumplimiento de las obligaciones laborales y de Seguridad Social con el personal que presta el servicio», además de multas entre el 5 y el 10 por ciento del importe de adjudicación.

Por si esto fuera poco, el 4 de diciembre, los trabajadores de la limpieza viaria y recogida de basuras se unieron a las concentraciones de las primeras. Los trabajadores, que llevan un mes sin cobrar, están haciendo una huelga encubierta: limpian las aceras, pero en los puntos limpios se acumulan ingentes cantidades de basura. Este fin de semana se incendió uno de esos puntos, aunque las causas del fuego se desconocen. En este caso, la contrata de basuras, Garbialdi-Sadifer, le dijo a la nueva alcaldesa que no pagará a sus trabajadores hasta que el Consistorio no les pague lo que se le adeuda, un total de cinco millones y medio. Este conflicto se remonta a la época de Fraile, cuando en apenas tres años y medio pasaron hasta cinco contratas diferentes en el servicio de recogida de basuras (Valoriza, Himalaya, Editec SL, Parla Limpio y la actual Garbialdi-Sadifer).

El ACC de Torrejón echa a Linorsa por impagos

Linorsa también tiene retrasos con las nóminas de trabajadoras de los centros del CSIC, la UNED y el laboratorio Arbitral Agroalimentario de Aravaca, la Escuela de Organización Industrial (EOI) y el Centro de Control Aéreo (ACC) de Torrejón. La diferencia con Parla es que los demás centros están al día con sus pagos. Al contrario que el Ayuntamiento de Parla, algunos de estos centros ya han tomado medidas para solucionar el conflicto. Es el caso del ACC de Torrejón, el mayor centro de control de España, que rescindió el contrato a Linorsa en favor de la empresa Interserver, que subrogará a las 16 trabajadoras, que llevaban meses cobrando tarde y mal. Tras esta noticia, las trabajadoras desconvocaron la huelga de manera inmediata. La mayoría de las empleadas superan los 50 años, llevan trabajando muchos años para esos centros y sus sueldos no llegan a los mil euros.