Salamanca, el barrio con más accidentes... y más graves

El barrio de Salamanca fue durante 2013 la zona de Madrid en la que más accidentes se registraron. Bien sea por cómo está urbanizado (el barrio está trazado en paralelas y perpendiculares que forman ángulos de 90 grados en casi todas las esquinas), bien por las características comerciales del mismo (es una de las zonas con más tiendas de Madrid), o bien por la densidad de vehículos que en determinados días, y de media, se mueven por este barrio, en el acomodado distrito madrileño se produjeron una media de tres accidentes diarios durante 2013.

De hecho, en ocho de los doce meses del año pasado, Salamanca se alza como el barrio de Madrid con más colisiones de circulación, con y sin heridos. Los otros cuatro meses sólo lo supera Centro, y por poco. Así se desprende del número de atestados y partes confeccionados por la Policía Municipal en sus informes sobre Datos y Actuaciones que, mes a mes, publica.

En ellos se comprueba que entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2013 se produjeron en Madrid un total de 11.728 accidentes, lo que supone una media de 32 cada día o, dividido en distritos, 1,5 por barrio. De esta forma, Salamanca duplica la cifra media de los otros 20 barrios de la ciudad.

Así, en el distrito de la Milla de Oro se vivieron 994 choques, mientras que cruzando la Castellana, en Centro, la Policía tuvo que acudir a atender 939 colisiones. El podio lo completa Chamartín, en donde hubo 852 alcances, a una considerable distancia de Chamberí, cuyas calles vivieron 727 accidentes. Sin embargo, los datos reflejan una sorpresa relativa, ya que no hay correlación directa entre el número de vehículos que circulan por cada uno de los distritos y el total de siniestros que en éstos se producen. Así, y teniendo en cuenta que el interior de la M-30 es la zona con mayor densidad de vehículos diarios, distritos como Moncloa (con 684 accidentes en todo el año), Arganzuela (629), Retiro (597) o Tetuán (580) no se encuentran entre los más afectados. De esta forma, Carabanchel (709) se cuela antes que Moncloa-Aravaca (684), encabezando un pelotón en el que también están Fuencarral- El Pardo (664), Ciudad Lineal (679) y Puente de Vallecas (661).

A partir de ese punto, las cifras de accidentes bajan considerablemente y ni siquiera presentan una media de un accidente y medio al día. El siguiente distrito donde más atestados se produjeron pasa a ser Latina (con 520 casos) y muy alejado a él se presentan Usera y Hortaleza, que, con sus 396 y 374 choques respectivamente, apenas superan el accidente diario.

Barajas, entonces, lidera el ranking de los barrios más tranquilos de Madrid para conducir. En el distrito del aeropuerto hay que esperar más de 1,6 días para que se registre uno de los 156 accidentes anuales, casi la misma situación que San Blas, donde en 162 ocasiones se produjeron estos hechos. Villa de Vallecas y Moratalaz son los otros barrios con menos casos, ya que registran cuatro veces menos colisiones que los más afectados y sólo presentan 243 y 280 casos cada uno.

Los datos reflejan los accidentes en los que la Policía levantó un parte o realizó un atestado, es decir, en gran medida, los más graves. Es por ello que, según esta estadística, en dos de cada tres accidentes, que se produjeron resultó herida una persona; Salamanca también lidera esta estadística.

Con lluvia y poca luz, más casos

El invierno es la estación en la que más alcances se produjeron y, en concreto, los días que preceden a las fiestas navideñas. La reducción de las horas de luz, las peores condiciones climatológicas y la concentración de vehículos en las mismas zonas hicieron que en diciembre se produjeran 2.024 alcances. Tras este mes, octubre se cuela antes que noviembre con 1.197 el primero y 1.126 el segundo. El hecho de que los distritos con más accidentes también sean los que presentan una mayor actividad de comercio y servicio también apunta a que existe una corelación entre el consumo y las colisiones.

En el polo opuesto se encuentran, por supuesto, los meses de verano. En agosto se registran casi la mitad de incidentes que en los meses de mayor actividad, seguido de junio y julio. Las vacaciones de verano producen que la ciudad esté semivacía y la actividad caiga considerablemente, por lo que los datos de colisiones reflejan también está situación.