Las lluvias en Madrid “asustaron” a los botellones de Halloween

Esta era la gran esperanzas de la autoridades. Y se ha cumplido. La noche de Halloween en Madrid ha transcurrido sin incidentes reseñables ni macrobotellones gracias a la meteorología, con lluvias a lo largo de toda la madrugada, y al dispositivo establecido de seguridad, han informado esta mañana fuentes policiales.

Según estas mismas fuentes, la capital ha tenido “absoluta normalidad” aunque sí se ha detectado una mayor presencia de personas en la calle que en los días anteriores del puente, sobre todo en la zonas de ocio nocturno.

La lluvia ha frenado en buena medida las citas programadas por los jóvenes para beber en la calle. Es más, los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, en las ultimas 24 horas, han tenido 110 intervenciones relacionadas con la meteorología.

Mañana, martes, el área de Portavocía, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid ofrecerá el balance de sanciones o incidencias durante el puente de Todos los Santos y la fiesta de Halloween.

Para estos días festivos, el Ayuntamiento de Madrid elaboró un dispositivo policial que ha contado con un refuerzo de 2.045 agentes, de los cuales 450 han controlado los posibles botellones, y otros 125 se han dedicado a la inspección de locales de ocio y posibles actos vandálicos contra autobuses municipales.

La Policía Nacional no ha tenido un dispositivo específico para este asunto pero los miembros de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) han estado alerta ante posibles casos de desórdenes públicos o robos, informaron a Efe fuentes de la Delegación del Gobierno.

La Policía Nacional y la Municipal de Madrid tenían localizadas diferentes zonas en las que jóvenes se citaron por redes sociales para hacer botellón este fin de semana de Halloween, aseguró la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González. A pesar de ello, la lluvia y el dispositivo de seguridad han evitado estas aglomeraciones.

Los bomberos... con mucho trabajo

La lluvia caída en la Comunidad de Madrid durante la noche del domingo y la madrugada del lunes ha obligado a los servicios de bomberos a realizar más de 175 salidas relacionadas con la formación de balsas de agua o caída de ramas, principalmente en la capital y la zona sur, aunque ninguna de ellas de gravedad.

En concreto, los Bomberos de la Comunidad de Madrid gestionaron entre las 23 horas del domingo y las 7 horas del lunes un total de 130 expedientes relacionados con la lluvia en toda la región, que conllevaron 65 intervenciones, según ha informado a Europa Press un portavoz de Emergencias 112 Comunidad de Madrid.

Además, los efectivos de este servicio del Ayuntamiento de la capital realizaron entre las ocho de este domingo y la misma hora del lunes un total de 110 intervenciones relacionadas con la lluvia, la mayoría relacionadas con la formación de balsas de agua e inundaciones, han indicado fuentes de Emergencias Madrid.

La lluvia ha afectado de manera principal a la capital y municipios del sur como Fuenlabrada, Móstoles, Getafe, Navalcarnero, Griñón y Moraleja de Enmedio, y, en menor medida, a localidades como Coslada.

De los 130 expedientes gestionados por los Bomberos de la Comunidad, 65 generaron salidas, aunque ninguna de ellas de gravedad. Principalmente estuvieron relacionadas con encharcamientos de agua, balsas en la vía pública, problemas con el alcantarillado, inundaciones en garajes y sótanos y retirada de ramas de árboles con riesgo de caída a la vía pública, así como pequeños derrumbes de muros. En ninguno de los casos se registraron heridos.

Por su parte, los Bomberos Ayuntamiento de Madrid realizaron 204 intervenciones desde las 8 horas del domingo a las 8 horas del lunes, con picos de llamadas e intervenciones en determinados momentos del día.

En total, 110 de ellas estuvieron relacionadas con la lluvia, todas ellas de escasa importancia y sin que se registraran daños personales. En concreto, 65 estuvieron relacionadas con daños por agua como la formación de balsas en calzada, rotura de instalaciones o inundaciones en viviendas o garajes; otras 20 fueron motivadas por saneamiento de cornisas y fachadas con elementos que habían caído o amenazaban con caer; y las 20 restantes se produjeron por la caída de ramas de árboles.