Borrasca Efraín

Las lluvias en Madrid tienen fecha de caducidad (pero no será pronto)

La semana comienza con precipitaciones hasta el próximo fin de semana, cuando el frío se adueñará de la región

Varias personas se protegen de la lluvia en Madrid en una imagen de archivo
Varias personas se protegen de la lluvia en Madrid en una imagen de archivoFERNANDO VILLARAgencia EFE

Pleno diciembre. Esa es la característica de las temperaturas y la pluviosidad que vive la Comunidad de Madrid. Tras los anuncios de nevadas en distintos puntos de la región, algo que podría volver a producirse también durante esta semana, las lluvias se han hecho señoras de los cielos de la Comunidad. En este sentido, la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunidad de Madrid para este lunes apunta a que habrá lluvias débiles y chubascos que aumentarán en frecuencia e intensidad durante la segunda mitad del día y temperaturas máximas en ascenso, con posibilidad de ser localmente notable.

El cielo tendrá intervalos nubosos aumentando de madrugada a nuboso o cubierto. Hay posibilidad de brumas y bancos de niebla matinales que serán más persistentes en la Sierra. Por su parte, el viento soplará flojo variable tendiendo al suroeste y las temperaturas mínimas se mantendrán sin cambios.

Los termómetros oscilarán entre los 8 y 15 grados en Madrid y Navalcarnero, los 7 y 16 grados en Alcalá de Henares, los 9 y 17 en Aranjuez, los 5 y 14 grados en Collado Villalba y los 9 y 16 grados en Getafe.

Los cielos permanecerán cubiertos en toda la región tanto este martes como el miércoles y el jueves. Una situación que cambiará hacia el fin de semana, cuando los cielos sin nubes se impondrán. Algo que dará un respiro a los ciudadanos tras más de dos semanas de precipitaciones. Todo a la espera de una bajada de temperaturas y la llegada de la previsible nieve de Fin de Año. Una circunstancia esta ante la que desde la Delegación del Gobierno ya se han tomado medidas. La región ha puesto a punto 651 agentes, 207 máquinas quitanieves y más de 22.000 toneladas de sal ante posibles inclemencias de importancia.