Debate del Estado de la Región

Ayuso planta cara a Sánchez y no se acogerá a la quita de la deuda: "Es una mutación constitucional por la puerta de atrás"

Carga contra “la oscuridad del sanchismo”, denuncia una “doble trampa fiscal” que pone en riesgo becas, sanidad y dependencia y acusa al presidente de estar “atado a la corrupción para sobrevivir en La Moncloa”

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sacó toda la munición política contra las políticas del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Debate del Estado de la Región que se celebra en la Asamblea de Madrid con un discurso que la consagra como el mayor azote político de Sánchez desde la Puerta del Sol. Arrancó su intervención contrastando las políticas madrileñas con las de Moncloa y dando un mensaje claro: "Nos opondremos a todas las leyes que se dicten bajo la ideología y atenten contra los madrileños" (como la Ley de Vivienda o la del Sólo Sí es sí), tras alertar de que "España se asoma a un abismo sin precedentes" y de que "nunca en la democracia se había levantado un muro entre Españoles desde La Moncloa" y de la "farsa de la nación paralegal catalana".

El primero de sus anuncios fue que Madrid no se sumará a la “mal llamada quita de la deuda autonómica” y dará la batalla para que esa “normativa ilegal engorde el listado de fracasos de Pedro Sánchez”.

La también líder del PP madrileño acusó al jefe del Ejecutivo de someter al país a “la mayor presión fiscal de la historia” que padece el para pagar la factura de la investidura. Señaló que “nada amenaza con ser más dañino para la Comunidad de Madrid y para toda España que la puesta en marcha del cupo catalán y la condonación de la deuda”. Y fue más allá: “Esto es una mutación constitucional por la puerta de atrás. Están haciendo imposible otro 155 cuando haga falta”. Es decir, se blindaría a Cataluña de cualquier control del Estado, aunque incumpla la legalidad.

Ayuso quiso hacer pedagogía de la cuestión y enumeró las consecuencias de lo que calificó como una “doble trampa fiscal a la que nos somete Sánchez a todos por siete votos”: recorte en becas, plazas de dependencia, médicos y profesores.

Habló de la “oscuridad del sanchismo”, de un Gobierno que actúa con “chantajes permanentes”, que se mueve en la “ilegalidad” y que solo ofrece “trampas” al servicio del independentismo y quiso abrir los ojos sobre lo que, en su opinión, esta en juego: "La ruptura territorial más profunda desde la Transición”, subrayó.

Por eso Madrid no cederá: “Por responsabilidad y por respeto a la verdad, no vamos a solicitar la mal llamada quita de deuda autonómica”, aseguró, al tiempo que prometió que su Ejecutivo usará “todas las herramientas” para frenar las concesiones al separatismo, dijo con contundencia.

Pero Ayuso no se detuvo solo en cuestiones fiscales. Elevó el tono contra Pedro Sánchez al asegurar que “la corrupción ata a Sánchez a La Moncloa”. Según la presidenta madrileña, el jefe del Ejecutivo “sabe que su horizonte judicial es, cuanto menos, complicado, y necesita todos los resortes del poder para tener una mínima oportunidad de sobrevivir un día más”, evidenciando la fragilidad que, a su juicio, sostiene al Gobierno central.

En contraste con esa imagen del Gobierno central colocó a Madrid como abanderada de un posible cambio: “Está en nuestras manos ofrecer una alternativa al peor gobierno de la democracia española”. Y lo hizo reivindicando la gestión madrileña como contrapeso a lo que considera un Ejecutivo desbordado por los pactos con independentistas y por la sombra de los escándalos: “El Gobierno de la Comunidad de Madrid está en atender las preocupaciones de los madrileños, en sacar adelante el compromiso que asumimos con ellos cuando nos votaron en las últimas elecciones, y en servir a España”.

Y para que quedara aún más claro el asunto, detalló la respuesta que dará Madrid a las "medidas ideológicas" del Gobierno que supongan "pasar de una democracia liberal a una autocracia del siglo XXI". Madrid no va a dejar deudas que pagar, pero "no vamos a permitir que salga del bolsillo de los madrileños los privilegios de los políticos independentistas ni de nadie, también se opondrá a la reducción de la jornada laboral; a la okupación e la inquiocupación, el reparto de inmigrantes "indiscriminado bajo criterios políticos" y a una Ley de Memoria Histórica que se aplique bajo intereses partidistas: "No vamos a permitir que ensucien el buen nombre e instrumentalice de la Real Casa de Correos", sentenció. En concreto, sobre el reparto de inmigrantes, Ayuso exigió al Gobierno el cierre de los centros de acogida de extranjeros en Alcalá de Henares y Campamento y una gestión más eficiente para aquellos que se declaran menores y no lo son: "firmeza ante la ilegalidad y oportunidades para los que quieren venir a trabajar", resumió.

Pero dejó una petición sobre la mesa al Gobierno de Sánchez: que no demore la planificación energética que ahora paraliza la economía regional, según dijo, pero fue pesimista en sus augurios: “Preparan un nuevo agravio a Madrid para descapitalizar España”.

Dardos al Delegado del Gobierno

Hasta130 invitados acudieron a presenciar en el hemiciclo el discurso de Díaz Ayuso en el inicio del curso político: desde el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, hasta el portavoz popular en el Senado, Miguel Tellado, pasando por el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, al que lanzó un dardo Ayuso al calificarle desde el atril de "activista político dispuesto a insultar". También estuvieron referentes del PP, como Esperanza Aguirre y representantes del tejido económico y municipal, con la presencia del presidente de CEIM, de la Federación de Municipios de Madrid y de distintos sindicatos, rectores de universidades madrileñas, además de una nutrida representación territorial con cerca de 30 alcaldes y concejales de ayuntamientos madrileños, que quisieron mostrar su respaldo a la presidenta.