Cultura

Huermur denuncia el abandono de los castillos del Puerto de la Cadena

La Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia asegura que los edificios están “sumidos en el caos”

Los accesos están llenos de maleza que impide el paso y deteriora el edificio
Los accesos están llenos de maleza que impide el paso y deteriora el edificiolarazonLa Razón

La Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia (Huermur) denunció ayer el «grave deterioro» que sufren las fortalezas del Portazgo Inferior y Superior, de los castillos del Puerto de la Cadena en Murcia, cuyos orígenes se remontan al siglo XII y que actualmente ostentan la categoría de Bien de Interés Cultural BIC, la más alta protección cultural que otorga la ley de patrimonio dado su importante valor patrimonial.

Los edificios, enclavados en pleno Parque Regional de El Valle y Carrascoy, están «totalmente abandonados, plagados de malezas, pintadas, basuras, y una larga ristra de desperfectos y preocupantes roturas. La situación fue denunciada por la asociación ante la Consejería de Cultura, pero todavía no se ha actuado sobre el enclave.

Estos castillos fueron incluidos en la investigación abierta por la Asamblea Regional con objeto de indagar sobre el mal estado de conservación y deterioro de las fortalezas y castillos de la huerta de Murcia, donde también se estudia la situación de los de Monteagudo, los Garres, Cabezo de Torres, la Asomada, Cabezo del Moro, o el de La Luz entre otros muchos. «Una investigación que está paralizada desde hace meses y sin actividad reciente conocida», según el colectivo.

Huermur, ha constado «como la maleza, incluso pinos de grueso calibre, crecen sin control sobre los muros del siglo XII sin apreciar mantenimiento alguno desde hace décadas, lo que terminará provocando si no se remedia, la caída de muros por el efecto de las raíces del arbolado, y roturas de difícil y costosa solución».

La asociación asegura que los dos castillos del siglo XII «están prácticamente sumidos en el caos, con unos accesos destrozados e insalubres».