Denuncian la "brutal agresión" de un interno de la cárcel de Campos del Río (Murcia) a un funcionario de prisiones

La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) ha denunciado públicamente que un interno del centro penitenciario Murcia II, situado en el municipio de Campos del Río, agredió "brutalmente" este jueves a un funcionario de prisiones de servicio en el Departamento de Jóvenes, según informaron fuentes de esta organización en un comunicado.

En este sentido, la Asociación ha precisado que en la prisión se considera jóvenes a los internos mayores de 18 y menores de 21 años y, excepcionalmente, los que no hayan alcanzado los 25 años de edad, según artículo 173 del Reglamento Penitenciario.

El interno en cuestión, tras haber protagonizado un conato de pelea en el patio del módulo y presentar una actitud "muy violenta y agresiva", había sido separado del resto para intentar que se tranquilizara y depusiera su actitud.

Ya en la zona de seguridad, mientras se intentaba "desescalar" la situación y sin que nadie lo esperase, el individuo "se abalanzó sobre uno de los funcionarios de prisiones presentes, golpeándole violentamente en la cara en repetidas ocasiones", según las mismas fuentes.

Como consecuencia de los golpes, el funcionario de prisiones sufrió heridas en el labio y pómulo, teniendo que abandonar su puesto de trabajo para ser atendido por personal sanitario que procederá a valorar la gravedad de sus lesiones. Gracias a la rápida intervención de los funcionarios de prisiones que acudieron en su ayuda, no hubo que lamentar males mayores, según la APFP.

Tras la agresión, el interno fue trasladado al Departamento de Régimen Cerrado, manteniendo en todo momento la misma actitud "violenta y agresiva", intentando zafarse continuamente con reiteradas tentativas de agresión a los funcionarios encargados de su traslado, "siendo necesario utilizar la fuerza física mínima imprescindible para contenerle y evitar que pudiese agredir a más personal", tal y como ha precisado la Asociación.

La APFP ha manifestado en primer lugar su "más enérgica repulsa" a esta "injustificada agresión", a la vez que ha mostrado todo su apoyo al compañero agredido y al resto del personal involucrado.

Del mismo modo, la Asociación ha solicitado a la administración penitenciaria "una actuación ejemplar y decidida ante este tipo de situaciones ordenando, con carácter inmediato, el traslado del interno a otro centro penitenciario lo antes posible".

"Aprovechamos para recordar que estas situaciones se dan, por desgracia, cada vez más a menudo", según la Asociación, que ha arremetido contra "las políticas 'buenistas' que insisten en la relajación de medidas regimentales y el detrimento de la autoridad de los profesionales penitenciarios frente a los internos que esta administración penitenciaria fomenta desde que se hizo cargo del sistema penitenciario".

A su juicio, estas políticas "están generando un caldo de cultivo cuyas consecuencias siempre sufren los mismos, los profesionales penitenciarios en contacto directo con los internos".

APFP ha asegurado que seguirá exigiendo al Ministerio del Interior un estatuto propio como marco normativo para los profesionales penitenciarios, el Grupo B para los funcionarios del Cuerpo de Ayudantes, el reconocimiento de profesión de riesgo, la adecuación de los medios coercitivos al siglo XXI con la aprobación de pistolas taser, así como una actualización retributiva con la equiparación salarial con sus compañeros de Cataluña.