Opinión

Formula 1 en Barcelona: el RACC ignora a España

El RACC de Cataluña ha pedido en una nota oficial ayuda a todas

las Administraciones y entidades "consenso y unidad de acción" para

mantener la Formula 1 en el circuito de Montmeló. El documento destila en todas

sus líneas un tufo independentista debido, sin duda, a las ideas aldeanas tanto

del presidente del circuito, Vicenç Aguilera, como al del director, Joan

Fontseré.

A pesar de pedir la colaboración del "Estado Español",

el texto no sólo ignora, sino que retuerce el lenguaje para no reconocer que lo

que se disputa en la pista barcelonesa cada año es el Gran Premio de España. Y

para ello recurre a la fórmula de "Gran Premio de F1 en Cataluña" o

que "el Circuit de Barcelona Catalunya continúe acogiendo a la F-1".

Y falsea la realidad cuando afirma que el RACC "en 1969

recuperó la carrera de F-1 en el circuito de Montjuïch" cuando el Gran

Premio de España se comenzó a disputar en el circuito del Jarama de Madrid el

23 de julio de 1967 y se alternó cada año con Montjuïch hasta que el circuito

catalán fue suspendido a raíz de un trágico accidente con muertes. El último

Gran Premio en el Jarama fue en 1981. 

Sorprende, por otra parte,

que pidan ahora ayuda a España, aunque no quieran nombrar a nuestro país,

cuando los desprecios a la bandera y al himno nacional son una constante en las

tribunas y la megafonía de Montmeló. Pese a que ningún aficionado español

quiere dejar de ver en su país los éxitos del madrileño Carlos Sainz en la

F-1, posiblemente Barcelona pierda la carrera. La Formula 1 es una competición

global que no entiende de juegos de payeses.