Isabel Díaz Ayuso

Génova contra la pandemia de Ayuso

Desde luego a Sánchez le ha tocado el Gordo de la lotería de Navidad anticipadamente, con Génova inmersa en una lucha fratricida con Sol que ya está rebasando lo que podría calificarse como de ordinaria y normal discrepancia puntual entre el centro y la periferia del partido.

Ahora, la voluntad de Ayuso de celebrar las cenas de Navidad con los afiliados es el motivo o la excusa para prohibirlas en toda España, y por tanto también en Madrid, que es el objetivo a batir, no por el PSOE –de momento– sino desde el propio PP, convirtiéndolo así en política de Estado. Todavía están muy próximas las elecciones del pasado 4 de mayo en las que Ayuso le ocasionó a Sánchez la mayor y monumental derrota desde la moción de censura de 2018 con la que accedió al Gobierno. Pero también, y conviene no olvidarlo, le significó a Casado el mayor triunfo desde entonces, que supuso hasta ahora la tendencia ascendente del PP con el sorpasso al PSOE.

Alega Ayuso, como presidenta autonómica, que no hay razones objetivas para anular esas tradicionales cenas en base a los datos epidemiológicos existentes, que sitúan a Madrid muy por debajo de la media nacional; y que el mensaje que se está trasladando a la población es el de un miedo no justificado con un daño muy fuerte contra un sector –la hostelería y la restauración– muy dañado ya por este motivo desde hace demasiado tiempo. Mientras, este domingo 60.000 aficionados –¡incluida la ministra de Sanidad!– asistieron en el Bernabéu al partido de la Liga del Real Madrid y próximamente está anunciado un concierto con una asistencia previsiblemente muy superior al de esas cenas navideñas de partido.

¿Qué mensaje se envía a los españoles respecto a la estrategia conveniente para acabar con la inacabable pandemia? La respuesta al parecer –según las obras y no las palabras– debería ser que la que convenga respecto al próximo congreso del PP de Madrid en el semestre que viene. De entrada, sorprende que la dirección del PP nacional sepa más de la situación sanitaria en la CAM que el propio Gobierno regional, que es quien tiene la competencia en la gestión en la materia, lo cual refleja lo absurdo de la situación. ¿Quién dicta la política sanitaria, Génova o la Consejería de Sanidad correspondiente? ¿Génova o Moreno en Andalucía, Mañueco en Castilla y León y Feijóo en Galicia? Es necesario aclararlo.

Desde luego, esta situación se ha convertido en un lamentable espectáculo que impide asegurar la necesaria alternativa a Sánchez que España y los españoles esperan. Y entre ellos también, por supuesto, los ciudadanos madrileños.