Sin Perdón
La campaña contra Feijóo
«Ante este escenario dominado por La Moncloa, Feijóo tiene difícil colocar sus mensajes y realizar la labor de oposición»
Haga lo que haga, Feijóo es malo. Es algo que no se resolverá hasta que llegue a la Moncloa. Nos encontramos ante una ecuación imposible de solucionar. La realidad es que no es más que propaganda. El sanchismo y sus aliados mediáticos han desatado una campaña que se sustenta en que es débil, hace seguidismo de Vox y Ayuso y no modificará la ingeniería social desarrollada por el gobierno socialista comunista. En definitiva, que su liderazgo es inexistente. Por otra parte, la derecha acomplejada hace un patético seguidismo, como ha sucedido en ocasiones anteriores. Estamos ante un disparate sin fundamento. Hasta que Casado fue apartado de la presidencia del partido, Feijóo era presentado por la armada mediática controlada por Sánchez como un moderado y buen gestor que sería el líder ideal. Es importante remontarse a las campañas que sufrieron Suárez, Aznar o Rajoy. Ninguno era idóneo para un sector mayoritario del periodismo. Los tres sufrieron un nivel de descalificación y ataques similar al que dedican a Feijóo. Es cierto que el sanchismo es más sucio en sus campañas, pero el objetivo es siempre descalificar al rival. Otra pata de la estrategia es criticar la comunicación. No hay más que ver el NO-DO de RTVE para comprobar lo fácil que es comunicar para La Moncloa. Las radios y las televisiones del Ente Público están al servicio de Sánchez hasta un nivel de activismo que es insólito en una democracia. Por otra parte, es una profesión mayoritariamente de izquierdas. Finalmente, el Gobierno controla unos recursos publicitarios multimillonarios que se destinan a favorecer a los amigos. No estamos ante un concepto de servicio público, sino de servirse de lo público. Es el triunfo, además, del capitalismo de amiguetes y el paraíso de los lobistas. Ante este escenario dominado por La Moncloa, Feijóo tiene difícil colocar sus mensajes y realizar la labor de oposición. Ante cualquier noticia, RTVE saca a pasear a varios ministros y a los dirigentes de los grupos que apoyan a Sánchez mientras que el centro derecha se tiene que conformar con un nivel informativo bajo. Feijóo es un buen candidato que ganó las generales, las europeas y las municipales y autonómicas. El problema es que la campaña sanchista es implacable, pero fracasará como sucedió con Aznar y Rajoy.
Francisco Marhuenda. De la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España. Catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)
