Parresía

El debate del bono social

Sin mirarse antes el ombligo, García ha tirado de la demagogia para torpedear al rival y acaparar titulares

MADRID.-Mónica García reconoce su "error" y dice que estudiará cómo devolver el dinero del bono para consumidores vulnerables
Mónica GarcíaEuropa Press

Con la que está cayendo, con los precios por las nubes, con tantas familias apuradas para llegar a fin de mes, con colas importantes de españoles a las puertas de las tiendas de «todo a un euro», causa bochorno la última explosión política, surgida a cuenta del bono social térmico. Resulta que a Mónica García, la líder de Más País, le ha salido el tiro por la culata pidiendo la dimisión del vicepresidente de su Comunidad Autónoma por percibir esa ayuda cuando ella, su propia familia, también la ha cobrado. No lo sabía la madrileña, o eso parece. Lo ha tenido que descubrir un periodista.

Sin mirarse antes el ombligo, García ha tirado de la demagogia para torpedear al rival y acaparar titulares. Al hacerse pública la incongruencia ha reconocido su error, aclarando que ella devolverá ese dinero, porque no es como los que gobiernan la Comunidad de Madrid. Y ha explicado –ahí va su segunda incongruencia– que ese ingreso del bono social entró automáticamente en la cuenta común con su marido. No, de ninguna manera: las ayudas no caen del cielo, tienen que solicitarse, que no nos tomen el pelo. Y cada ayuda que llega a una familia con recursos deja de percibirla una familia vulnerable. Nada nuevo bajo el sol, por desgracia. Nos rodean políticos a menudo desinformados, sectarios, más enfocados en generar crispación social que en solucionar problemas.

Ahora bien, a pesar del patinazo de Mónica García, coincido con ella en el fondo de la cuestión que planteó: ni ella, ni Ossorio, ni Alfonso Guerrero, ni otros políticos con familia numerosa deberían beneficiarse de euros «sociales» si disfrutan de un patrimonio personal saneado y de un sueldo más que decente. No es ético, aunque lleve muchos años siendo legal.

Y en este punto, llegamos al ámbito nacional y al punto culminante de la polémica, que tiene como protagonista a la ministra de Transición Ecológica. Teresa Ribera ha anunciado «recortes» en el bono social, a la vista de estos casos, «para que no haya más personas que se aprovechen de las políticas sociales». ¿Por qué justo ahora toma el Gobierno cartas en el asunto? Por el estupor social causado, sencillamente, no porque se lo hubiera planteado con anterioridad. El debate de los requisitos para acceder a las ayudas sociales siempre estuvo ahí, latente, pero ahora tenemos unas elecciones cruciales a la vuelta de la esquina, es lo que hay. Y tenemos una moción de censura extraña, como poco, la semana que viene, con un candidato surrealista, a juego con el país que se nos está quedando. Ya lo comentaremos el próximo viernes.