España es uno de los países con mayor sentimiento de pertenencia a la UE

Desde este pasado 1 de julio, España ha asumido la Presidencia del Consejo de la Unión Europea, que ejercerá hasta fin de año, independientemente del resultado de las elecciones generales del 23-J. Es la quinta presidencia semestral que, por turno, le toca a España. Las anteriores fueron en los años 1989, 1995, 2002 y 2010. Pero cabe preguntarse, desde aquel lejano 1986 en que nos unimos a la Unión Europea, cual es el grado de implicación de la sociedad española en la Europa de los 27 y cual el sentimiento de pertenencia al selecto club europeo, o si es mayor o menor que el del resto de los ciudadanos comunitarios. Es decir, cómo ha ido calando entre los españoles el asumir las fronteras comunes, la pérdida de una moneda propia en favor de otra común o la aceptación de decisiones judiciales y normativas europeas; tras estos años ¿nos sentimos plenamente integrados?

Con motivo de las últimas elecciones al Parlamento Europeo, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) preguntó a los españoles en qué medida creían que las decisiones que se toman en el seno de la Unión Europea afectan a la vida de los españoles, el 81,6 por ciento respondió que mucho o bastante.

El Eurobarómetro del invierno 2021/2022 quería conocer el sentimiento de pertenencia a la Unión Europea de los ciudadanos de los distintos países que la conforman; los españoles contestaron en un 81 por ciento que se sienten ciudadanos de la UE, frente a la media europea que baja al 71por ciento, diez puntos menos.

Con respecto a si nos sentimos unidos con Europa, la media europea contesta afirmativamente en un 58 por ciento, mientras en España superamos en 3 puntos con el 61 por ciento.

También los españoles se sitúan por delante del resto de europeos al estar en total acuerdo en que se deberían de tomar más decisiones a nivel de la Unión Europea, con el 76 por ciento, frente al conjunto europeo que se reduce al 57 por ciento, 19 puntos porcentuales menos.

Ante la cuestión de reforzar las fronteras externas de la Unión Europea con más guardias fronterizos y guardacostas europeos, la inmensa mayoría de los ciudadanos europeos y españoles están de acuerdo, con el 71 por ciento y 64 por ciento respectivamente.

El estudio también preguntaba a los europeos sobre los principales problemas que los 27 miembros estaban afrontando.

El problema más importante para los ciudadanos comunitarios era, con el 41 por ciento, la subida de precios/inflación. El segundo la sanidad/seguridad social con el 32 por ciento. Tercero, la situación económica con el 19 por ciento; cuarto, el medio ambiente/cambio climático con el 16 por ciento y el desempleo en quinto lugar con el 14 por ciento.

Pero los españoles no coincidimos con ese orden de prioridades y mucho menos con los porcentajes. Para nosotros, el número uno de los problemas es la sanidad/seguridad social con el 42 por ciento. Diez puntos por encima de la media europea.

El desempleo en España es el segundo problema, con el 35 por ciento, 21 puntos por delante del conjunto europeo, en donde es quinto. A los españoles les preocupa en tercer y cuarto puesto la subida de precios/inflación y la situación económica, con el 27 por ciento y 26 por ciento, respectivamente, cuando en el conjunto de la Unión Europea los porcentajes difieren mucho de España; 41por ciento y 19 por ciento, respectivamente. En Europa preocupa muchísimo más que en España la inflación, sin embargo aquí es más importante la situación en la que se encuentra la economía.

El que en la UE, ocupa el décimo lugar entre los problemas que más preocupan, en España escala hasta la quinta posición; las pensiones, que preocupa al 9 por ciento y al 11 por ciento, respectivamente.

Tanto los españoles como el resto de ciudadanos de la Unión Europea tienen en común el considerar a sanitarios y personal médico como la institución que más confianza les merece, con el 84 por ciento y el 78 por ciento, respectivamente, y por el contrario, sitúan a la cabeza de su desconfianza a los partidos políticos, con el 75 por ciento y el 86 por ciento, respectivamente. Nótese que en España son 11 puntos más que la media europea.