Editorial

El problema de llegar a fin de mes

Los alquileres suben, la vivienda en propiedad se aleja y la mitad de las familias admiten que apenas llegan a fin de mes. Pero para el Gobierno, la economía va como un cohete

La inflación sigue sin dar tregua este verano. Suma dos subidas consecutivas y acerca el IPC a la frontera del 3%. Hacer la compra se ha convertido para millones de hogares españoles en un ejercicio de contención en el gasto y les está llevando a una economía casi de supervivencia. El incremento de los precios en productos básicos ha reducido a la mitad la compra que hacían la mayoría de las familias hace tan solo cuatro años, mientras que el coste de la factura para simplemente poder comer suma cifras cada vez más altas. Y si los malabares que hay que hacer cada mes no fueran suficientes para llenar la despensa, el problema de la vivienda, que se encarece sin tregua, merma aún más la capacidad adquisitiva de los ciudadanos. Los alquileres suben, la vivienda en propiedad se aleja y la mitad de las familias admiten que apenas llegan a fin de mes. Pero para el Gobierno, la economía va como un cohete.