Pacientes

La incertidumbre de convivir con el asma en tiempos de pandemia

Las herramientas digitales permiten a los pacientes mejorar su calidad de vida con información científica

Más de la mitad de pacientes con asma bronquial ha tomado en algún momento corticoides sistémicos, según el estudio
Más de la mitad de pacientes con asma bronquial ha tomado en algún momento corticoides sistémicos, según el estudioDreamstimeDreamstime

Con la pandemia de la Covid-19 como telón de fondo, las enfermedades respiratorias crónicas, como el asma, se transforman en una losa que pesa demasiado a estas alturas, ya que convierte a los afectados en personas vulnerables frente al SARS-CoV-2, al menos psicológicamente, ya que no existe evidencia científica en el momento actual de que los pacientes asmáticos presenten más probabilidades de contagio por el nuevo coronavirus, ni tampoco se ha demostrado que tengan mayor riesgo de ser ingresadosen el hospital cuando se desarrolla la enfermedad, tal y como confirma la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, (Separ).

A pesar de esa realidad avalada científicamente, lo cierto es que la incertidumbre de la situación actual resulta desconcertante para la mayoría de personas que conviven con el asma, una enfermedad respiratoria que se estima que afecta a alrededor del 5% de la población adulta y a cerca del 10% de la población infantil en nuestro país. «Estamos viviendo unos meses muy complejos, con muchísimas noticias sanitarias que cambian y que en ocasiones llegan a ser incluso contradictorias. Eso ha expuesto a los pacientes de enfermedades raras o patologías respiratorias crónicas a vivir en un ambiente de incertidumbre constante, pues les llega información no fiable que genera confusión y miedo», asegura Shane Fitch, fundadora de la Fundación Lovexair, quien hace hincapié en que «ser rigurosos con el tratamiento médico pautado y tener una buena adherencia a él resulta siempre imprescindible para mejorar la calidad de vida de los afectados, pero más aún en estos momentos, pues el agravamiento de los síntomas puede desencadenar más nerviosismo y desasosiego».

Conscientes del temor que sobrevuela a los asmáticos estos últimos meses, especialmente a aquellos que han pasado la Covid-19, Lovexair ha desarrollado varias herramientas para ayudar a esos afectados a través de la plataforma happyair.org, así como grupos de apoyo en las redes sociales en los que los profesionales de la salud de la fundación apoyan al paciente con información validada científicamente para aclarar dudas sobre las posibles secuelas, resultados de los test, preocupaciones por la reacción del entorno familiar o laboral y proveer de forma gratuita un programa de rehabilitación. «Contamos con grandes especialistas en comunicación para dar la mejor información al paciente y también con profesionales sanitarios de distintas ramas, como fisioterapeutas o psicólogos en red, que dan soporte en la vida activa del paciente», explica Fitch, quien destaca que «nuestra apuesta por la digitalización viene de muy atrás, porque llevamos más de diez años innovando en e-health, aunque la pandemia actual ha hecho que todo esto cobre más fuerza y más valor si cabe. Es una forma muy eficaz de ayudar a que los pacientes tomen conciencia de su enfermedad, un paso determinante a la hora de controlar una patología crónica como puede ser el asma». Y es que, cuando las dudas asaltan a los pacientes, resulta habitual caer en la tentación de buscar en internet qué es lo que ocurre, pero con el grave peligro de hacerlo sin criterio. «Eso nos hace muy necesarios, ya que nuestra intención es la de ayudar a los afectados a mejorar su calidad de vida, conociendo cuáles son las diferentes etapas de su enfermedad y los pequeños cambios con los que pueden lograr mejorar su día a día», reconoce Fitch.

Si hay algo que hemos aprendido de esta pandemia es que las herramientas digitales son el futuro de la Medicina, pero también del presente, sobre todo cuando se trata de estar cerca del paciente. Conscientes de ello, Novartis y Lovexair han puesto a disposición de todos los afectados con asma la plataforma Altys (happyair.org/altys/), un asistente virtual sobre esta patología desarrollado con inteligencia artificial que aprende cómo apoyar mejor a cada persona conforme incremente la intercalación entre el paciente y el asistente. «El asistente ajusta la información y los recursos que provee a cada persona a la vez que personaliza la manera en que se comunica con cada individuo según su perfil, edad y necesidades. Nunca vamos a prescindir de las relaciones humanas con los profesionales de la Sanidad, pero está claro que estas nuevas aplicaciones son muy positivas», explica la fundadora de la Fundación Lovexair, cuyo contacto ha sido facilitado por Novartis.

El asma es una patología con gran impacto en la población infantil, de ahí que los nuevos pasos de la fundación se dirijan hacia la investigación, «donde estamos a punto de comenzar un estudio clínico sobre el asma infantil junto a cuatro hospitales del área metropolitana de Barcelona que busca validar un modelo de cuidado integral, usando recursos de salud digital adecuados a los jóvenes para ayudarles a adaptar su estilo de vida sin que tengan que por ello tengan que dejar de vivir y de cumplir sus sueños», avanza Fitch.