Sociedad

Alimentación

Estos son los quesos más saludables del mercado

Aunque este alimento engorda mucho, puede ser un alimento compatible con una dieta sana y baja en calorías si sabemos cuál escoger

Clara Díez esta al frente de la Formaje, la tienda referente del mundo del queso en Madrid
Clara Díez esta al frente de la Formaje, la tienda referente del mundo del queso en MadridCristina BejaranoLa Razón

El queso es un producto lácteo rico en calcio y proteínas de alta calidad. Dado que la lactosa se convierte en ácido láctico durante la fermentación, su contenido de azúcar natural suele ser bajo. A medida que el queso madura, pierde humedad y adquiere consistencia. El queso fresco es blando y aguado, mientras que el queso más curados se endurecen y pierden humedad con el tiempo. Este proceso puede concentrar los nutrientes, la grasa de la leche y las proteínas, además de aumentar la ingesta de calorías y reducir la lactosa. Para saber cuál elegir, debemos analizar la parte de ingredientes en el etiquetado. Debido a que el contenido nutricional de la comida le dirá la ingesta de calorías, es muy fácil dejarse llevar por el que menos calorías tenga, pero es mucho más importante saber de qué ingredientes está compuesto el alimento. Y lo ideal es que solo aparezcan leche y fermentos lácteos.

Ya sea vaca, cabra u oveja, es importante entender que,la diferencia a la hora de elegir un animal, radica en la caseína, la proteína de la leche, que es una molécula difícil de digerir. El 80% de la proteína de la leche proviene de la caseína, haciendo que las digestiones sean más costosas y comprometiendo en mayor medida la microbiota intestinal si hay un consumo elevado y continuado. Teniendo esto en cuenta, el queso más recomendado es el de cabra, porque la leche es más parecida a la humana, un 10% de caseína, por lo que es el más fácil de digerir.

Queso fresco
Queso frescoLa Razón

En cuanto a su contenido de grasa, el queso fresco es la opción más ligera, mientras que el queso curado tiene el mayor contenido de grasa y el mayor contenido de colesterol. Además, contienen vitaminas del tipo B y proteínas en proporciones altas. Los quesos Quark, Ricotta y Cottage son los quesos frescos naturales con el contenido más bajo en grasa. Estos quesos aportan 100 kcal por cada 100 gramos y tienen un aporte de grasa del 4%. El siguiente grupo de quesos frescos con un valor energético ligeramente superior, hasta 160 kcal por 100 gramos, es el queso de Burgos, el queso Mató o el requesón. El equivalente a 100 kcal son 60 gramos de queso, y su contenido de grasa es de 11-12. %. Por tanto,los quesos con menos calorías son los que menos tiempo pasan en el proceso de curación, o los quesos que ni siquiera pasan por ese proceso. Un vaso de leche contiene un 88% de agua, el queso fresco un 70% y el queso curado un 35%. Sin embargo, la proteína contenida en el queso fresco es tres veces mayor que la de un vaso de leche.

A medida que la ciencia ha ido avanzando se han ido desterrando muchos mitos sobre el queso. Este alimento milenario nos aporta innumerables beneficios para nuestra salud.
A medida que la ciencia ha ido avanzando se han ido desterrando muchos mitos sobre el queso. Este alimento milenario nos aporta innumerables beneficios para nuestra salud.larazon.es

Los mejores para los intolerantes

Para las personas con intolerancia a la lactosa o problemas intestinales causados por la proteína de la leche, el queso puede ser un alimento prácticamente prohibido. Los quesos con bajo contenido en lactosa son Ricota, Havarti, Mozzarella, Feta, Rollo de Cabra, Cheddar, Fresco, Halloumi o Manchego. Si además del contenido en lactosa, también queremos considerar las proteínas animales que pueden causar problemas intestinales, las mejores opciones son las proteínas de cabra u oveja, como rulos de cabra, feta, fresco o halloumi. Por otro lado, el queso vegetal es una buena opción, especialmente para personas que padecen intolerancias o problemas intestinales y necesitan retirar los productos lácteos de su dieta. El queso vegano es rico en nutrientes, no contiene colesterol y no tiene efectos secundarios sobre la microbiota. Asimismo, se pueden utilizar ingredientes básicos, como la levadura nutricional, bebidas vegetales, frutos secos y especias, para obtener quesos vegetales que son muy similares en sabor y textura a los quesos tradicionales.