Bruce Willis

Qué es y qué tipos de afasia hay, la enfermedad diagnosticada a Bruce Willis

se produce cuando aquellas regiones del cerebro dedicadas al habla o la escritura se ven dañadas. Puede deberse a un accidente, un ictus, un tumor cerebral...

Fotografía de archivo fechada el 9 de enero de 2019 del actor estadounidense Bruce Willis
Fotografía de archivo fechada el 9 de enero de 2019 del actor estadounidense Bruce WillisWILL OLIVERAgencia EFE

Hoy se ha sabido, a través de su hija, que el actor Bruce Willis deja temporalmente la interpretación tras habérsele detectado afasia. Se trata de una situación de largo recorrido de la que la familia era consciente hace meses, pero la revelación de la noticia se ha dado en el marco de la exposición pública a la que se estaban sometiendo los últimos trabajos del actor. Pese a haber participado en “Glass” de M. Night Shymalan en 2019, lo cierto es que Willis llevaba varios años alejado de las grandes producciones, con casi todas sus últimas películas lanzadas directamente al mercado doméstico o al del “streaming”.

La afasia es un trastorno del lenguaje que se produce cuando aquellas regiones del cerebro dedicadas al habla o la escritura se ven dañadas. Puede deberse a un accidente, un ictus, un tumor cerebral, etc.

La afasia es un trastorno del lenguaje que se produce cuando aquellas regiones del cerebro dedicadas al habla o la escritura se ven dañadas. Puede deberse a un accidente, un ictus, un tumor cerebral, etc.

En estos casos, la persona que lo sufre no puede comunicarse de manera tradicional con palabras escritas o habladas y en ocasiones tampoco con mímica. Es aquí donde las aplicaciones pueden jugar un papel muy importante.

Según explica Mapfre Salud en su web, hay varios tipos de afasia.

Afasia de Broca (motora)

Se caracteriza por una expresión verbal muy afectada y una comprensión aceptable, aunque también afectada. Estos pacientes tienen imposibilidad de producción verbal fluida y suelen emplear frases cortas con gran esfuerzo. También suelen estar alteradas la denominación (búsqueda del nombre de las cosas), la lectura y la escritura. La lesión radica a nivel frontal izquierdo, donde se ubica la llamada área de Broca.

El paciente es consciente de las limitaciones en su expresión verbal por lo que habla poco y emplea una gramática simple (tipo telegráfico), sin frases elaboradas. Sin embargo, su comprensión del lenguaje es casi normal.

Afasia de Wernicke (sensorial)

Se trata de un trastorno de la comprensión. La producción lingüística es fluida y abundante pero incoherente. El lenguaje carece de significado por el empleo de parafasias fonémicas (reemplazan una palabra por otra fonéticamente similar pero conceptualmente diferente).

No son conscientes de sus errores gramaticales. Se produce por lesión de áreas temporo-parietales donde está ubicada el área de Wernicke. Estos pacientes no presentan déficit motor dado que su lesión no afecta al área cerebral que controla el movimiento.

Afasia anómica

Tiene dificultad para encontrar el término correcto de las cosas. Es el trastorno afásico más común. Es frecuente que los pacientes que la sufren empleen los llamados circunloquios con la finalidad de suplir el nombre que no consiguen hallar.

Afasia global

El paciente no puede hablar, entender, leer ni escribir. Este término se emplea cuando están gravemente afectadas las funciones expresivas y receptivas del lenguaje. Los pacientes que la sufren tienden a la depresión por su imposibilidad comunicativa y su afectación motora añadida (hemiplejía derecha). La lesión cerebral que padecen es extensa.

Afasia de conducción

El lenguaje espontáneo es fluido con la comprensión relativamente preservada. Tienen problemas para la discriminación fonémica, la comprensión de frases y, sobre todo, gran dificultad para la repetición. La lesión radica a nivel temporal.

¿Cómo afecta?

La afasia afecta fundamentalmente a la expresión del lenguaje, algo que se puede manifestarse de diversas formas. Es frecuente detectar parafasias o errores en el empleo de fonemas (por ejemplo, decir pera en lugar de para), palabras (por ejemplo, decir sábana en lugar de mantel o trapo en vez de toalla) y anomia (dificultad para encontrar los términos más adecuados para nombrar los objetos). En la progresión natural se detecta una dificultad progresiva en la comprensión del significado de las frases complejas. Comprenden, sin embargo, palabras. Otro síntoma característico es el agramatismo, que se manifiesta con la omisión o el uso incorrecto de formas gramaticales, empleo de verbos, artículos o proposiciones (por ejemplo, omiten artículos, desordenan las palabras o emplean incorrectamente los tiempos verbales) y de errores fonéticos en la lectura. En general el lenguaje se hace cada vez más simplificado y menos comprensible con pérdida de la fluidez normal, pausas excesivas, frases cortas y emitidas con gran esfuerzo e incluso tartamudez. Dado que la persona es consciente de su alteración en la expresión del lenguaje, ello puede conllevarle al mutismo y retraimiento social.

Se desconoce también y por el momento qué ocurrirá con las nueve películas que el actor tiene todavía pendientes de estreno.